viernes, 24 de octubre de 2008

¿Existe el Infierno?

texto

¿Existe el Infierno? — ¿Qué dice el Antiguo Testamento?
¿Existe el Infierno? Una perspectiva global y apropiada de la Biblia, incluye un verdadero, eterno y físico infierno. ¿Qué crees tú?

Resulta interesante descubrir que existen más versículos bíblicos acerca del infierno, que los que existen acerca del cielo. He aquí algunos versículos del Antiguo Testamento sobre el infierno. Daniel 12:2 revela: “Y del polvo de la tierra se levantarán las multitudes de los que duermen, algunos de ellos para vivir por siempre, pero otros para quedar en la vergüenza y en la confusión perpetuas” El infierno es descrito aquí como eterno. Isaías 66:24 declara: “Entonces saldrán y contemplarán los cadáveres de los que se rebelaron contra mí. ‘Porque no morirá el gusano que los devora, ni se apagará el fuego que los consume:¡repulsivos serán a toda la humanidad!’”. En esta escritura, el infierno es descrito como un lugar donde el fuego no se apaga. Deuteronomio 32:22 enmarca al infierno como un lugar donde Dios derrama su ira: “Se ha encendido el fuego de mi ira, que quema hasta lo profundo del abismo. Devorará la tierra y sus cosechas, y consumirá la raíz de las montañas”. Salmos 55:15 ilustra al infierno como el reino de la maldad: “¡Que sorprenda la muerte a mis enemigos! ¡Que caigan vivos al *sepulcro, pues en ellos habita la maldad!”.

¿Existe el Infierno? — ¿Qué dice el Nuevo Testamento?
¿Existe el infierno? Si la clara enseñanza del Antiguo Testamento no es suficiente, el Nuevo Testamento tiene mucho más que decir. 2 Tesalonicenses 1:9 nos muestra: “Ellos sufrirán el castigo de la destrucción eterna, lejos de la presencia del Señor y de la majestad de su poder”. Apocalipsis 14:10-11, habla del anticristo, enseñándonos: “Beberá también el vino del furor de Dios, que en la copa de su ira está puro, no diluido. Será atormentado con fuego y azufre, en presencia de los santos ángeles y del Cordero. El humo de ese tormento sube por los siglos de los siglos. No habrá descanso ni de día ni de noche para el que adore a la bestia y su imagen, ni para quien se deje poner la marca de su nombre”. El infierno es un lago de fuego ardiente, como lo describe Apocalipsis 20:14-15: “La muerte y el infierno fueron arrojados al lago de fuego. Este lago de fuego es la muerte segunda. Aquel cuyo nombre no estaba escrito en el libro de la vida era arrojado al lago de fuego”.

¿Existe el Infierno? — ¿Qué dijo Jesús?
Aquellos que argumentan que el infierno no existe, lo hacen basados en su creencia de que Jesús enseñó amor, paz y perdón y que no enseñó acerca de un lugar eterno de ardiente castigo para los no creyentes. Sin embargo, la verdad es exactamente lo opuesto. Jesús enseñó acerca del infierno como nadie lo hizo en la Palabra de Dios. Jesús describió al infierno como un fuego que nunca se apagará (Mateo 3:12), un lugar de fuego eterno (Mateo 25:41), castigo eterno (Mateo 25:46) y como un lugar de tormento, fuego y sufrimiento (Lucas 16:23:24). Jesús enseñó específicamente acerca del infierno, muchas veces en su ministerio (Mateo 5:22, 29-30; 10:28; 18:9; 23:15,33; Marcos 9:43-47; Lucas 12:6; 16:23).

¿Existe el Infierno? — ¿De qué manera es justa una eternidad en el Infierno?
Si el infierno existe, ¿Cómo puede ser justo? ¿Por qué un Dios amoroso castiga a una persona por la eternidad, cuando sus pecados solo ocurrieron durante 70 u 80 años? La respuesta es que todo pecado finalmente está en contra de Dios, que es infinito (Salmos 51:4). Por lo tanto, como Dios es un ser eterno e infinito, todo pecado es merecedor de un castigo infinito.

Sí, Dios nos ama (Juan 3:16) y quiere que todos sean salvos (2 Pedro 3.9). Sin embargo, Dios es también justo y recto; él no deja al pecado sin castigo. Por eso, Dios envió a Jesús para que pague el precio por nuestros pecados. La muerte de Jesucristo fue una muerte infinita, para pagar nuestra deuda infinita de pecado, para que no tengamos que pagarlo en el infierno por la eternidad (2 Corintios 5:21). Todo lo que tenemos que hacer es colocar nuestra fe en Él y seremos perdonados y se nos promete un hogar eterno en el cielo. Dios nos amó tanto que nos otorgó la salvación. Si rechazamos su regalo de vida eterna a través del Señor Jesucristo, nos enfrentaremos a las consecuencias eternas de esa decisión: una eternidad en el ardiente infierno.

Si fueras a morir hoy, ¿estás cien por ciento seguro de que irás al cielo? ¡Asegúrate de ello hoy! (http://www.allaboutworldview.org)

miércoles, 17 de septiembre de 2008

Vida Oculta O Expuesta

Un ateo prometió a un predicador británico, Alexander
Maclaren (1826-1910) que frecuentaría su iglesia en los
cuatro finales de semana siguientes,


y que oiría su
presentación de las doctrinas principales del Cristianismo.
Compareció a la iglesia y oyó atentamente los sermones de
Maclaren. Despues la cuarta mensaje, el ateo se presentó la
todo el congregación y confesó haber recibido Jesus como
Señor y Salvador en su corazón. Maclaren se puso muy feliz y
no consiguió resistir al empuje de preguntar cuál de los
cuatro sermones habíale tocado más al punto de tomar aquella
decisión. El ateo contestó: "Sus sermones, señor, fueron
útiles, pero no fueron ellos que me persuadieron." Contó que
despues un de los cultos, al ayudar una señora bastante de
edad a seguir en un camino resbaladizo, ella miró para su
rostro y habló: "Me gustaría de saber si usted conoce mi
Señor y Salvador, Jesucristo. Él es todo en el mundo para
mí. Quisiera que usted Lo conociese también". El ateo dijo:
"Aquella palabra penetró hondamente en mi alma y yo fui para
casa donde me arrodillé y encontré a Cristo solo".

¿Cuántas veces durante nuestra vida cristiana nosotros
hablamos para alguien de la bendición de tener Jesus en el
corazón? La alegría de encontrar el Salvador es tan grande
que deberíamos hacerlo todos los días, en todos los lugares,
en todas las circunstancias. La decisión que un día tomamos
venía a estar reluciendo en nuestro rostro y contagiando
todos los ambientes en que nos encontramos.

Nuestro testimonio de dicha es mucho más poderoso que
cualquier sermón, por más elaborado que él sea. Necesitamos
comprender eso. Necesitamos practicar eso. Necesitamos creer
que la tarea de predicar el Evangelio no es solo del pastor
o de un líder religioso. Como cristianos debemos buscar a
Dios y pedirle el revestimiento de poder para que seamos
siempre bendiciones en Sus manos y jamás piedras de tropezón
o causa de escándalos. Un corazón dedicado al Señor puede
calentar los más gélidos corazones, como lo de aquel ateo de
nuestra historia.

¿Ha mantenido su vida cristiana oculta o ha buscado, con
ella, alumbrar el camino de los qué aún están perdidos?

lunes, 8 de septiembre de 2008

LEE ESTO SOLO SI TIENES PROBLEMAS


"Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el
mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al
mundo" (Juan 16:33).



Un hombre que muchos creen haber sido el mayor Presidente
americano, dio un ejemplo de actitud. Cuando él hizo siete
años de edad, fue forzado a dejar el aconchego de la familia
para trabajar. A los nueve años perdió su madre. Perdió su
empleo cuando tenía veinte años de edad. Anheló ir para una
Facultad de Derecho pero no consiguió. A los veintitrés años
él entró de socio en una pequeña tienda. Tres años más tarde
el socio murió y una gran deuda llevó años para ser paga. A
los veintiocho años, después de enamorar una chica por
cuatro años, la pidió en casamiento y ella lo degradó. En su
tercera tentativa él fue electo para el Congreso, pero a los
treinta siete años perdió la reelección. Su hijo murió a los
cuatro años de edad. Cuando este hombre tenía cuarenta cinco
años, se candidató al Senado y perdió. A los cuarenta siete
años intentó a Vice-Presidencia y perdió. Pero, a los
cincuenta uno años ha sido electo Presidente de Estados
Unidos. El hombre era Abrahan Lincoln. Aprendió a enfrentar
el desánimo y caminó adelante de él. ¿Sabía que ha sido
Abrahan Lincoln que, en medio a la Guerra Civil, en 1863,
estableció la celebración anual del Día de Acción de
Gracias? Lincoln aprendió lo cuanto es importante parar y
agradecer a Dios en medio a grandes dificultades.

¿Cual nuestra actitud delante de Dios cuando los problemas
nos abruman? ¿Murmuramos? ¿ nos Quejamos por Él nos haber
abandonado? ¿Afastamonos de Su presencia?

Necesitamos, como Lincoln, aprender a alabar y agradecer al
Señor en todos los momentos. En la alegría y en el éxito por
Su gran misericordia y amor; en las luchas por Él estar nos
disponiendo para grandes conquistas; en los momentos de
chascos y frustraciones porque valoraremos aún más nuestras
victorias.

El Señor Jesus prometió estar con nosotros todos los días y
eso incluye también los días de luchas y tribulaciones. A
nosotros cabe confiar y agradecer su compañía. Por más que
el día esté encapotado y triste, luego volverá a brillar el
sol de la alegría en nuestros corazones.

martes, 26 de agosto de 2008

EL PODER DE DIOS




CONOCIAS ESTOS HECHOS ?
SEGURO NO SABIAS HASTA AHORA
¡La muerte es cierta, pero la Biblia habla sobre la
muerte intempestiva! Haz una reflexión personal sobre esto.....
Muy interesante, lee hasta el final.....
Escrito en la Biblia (Gálatas 6:7):
No se engañe; De Dios no se burla:
en absoluto lo que un hombre ha sembrado, eso debe él
recoger.
Aquí están algunos hombres y mujeres
que se burlaron de Dios:
John Lennon (Cantante):
Algunos años antes, durante su entrevista con una revista americana, él dijo:
'La Cristiandad acabará, desaparecerá. Yo no tengo que discutir sobre eso. Yo estoy seguro. Jesús era
ok, pero sus asuntos eran demasiado simples. Hoy nosotros somos más famosos que Él' (1966).
Lennon, después de decir que el Beatles eran más famosos que Jesucristo, le dispararon seis veces.
Tancredo Neves
(Presidente de Brasil):
Durante la campaña Presidencial, él dijo que si consiguiera 500,000 votos de su fiesta, ni Dios lo quitaría de la Presidencia. Efectivamente él consiguió los votos, pero se enfermó un día antes de ser hecho Presidente, y murió..
Cazuza
(el compositor brasileño Bi-sexual, cantante y poeta):
Durante una muestra en Canecio (Río de Janeiro), mientras fumaba su
cigarro, él resopló fuera algún humo en el aire y dijo: 'Dios esto es para ti.'
Él se murió a la edad de 32 de SIDA de una manera horrible.
El hombre que construyó el Titánic
Después de la construcción del Titanic, un reportero le preguntó cuan seguro sería.
Con un tono irónico él dijo: 'Ni Dios puede hundirlo'
El resultado: Todos saben lo que pasó al Titánic.
Marilyn Monroe (Actriz)
Billy Graham la visitó durante una presentación de un show.
Él dijo que el Espíritu de Dios le había enviado a predicarle a ella.
Después de oír lo que el Predicador tenía que decir, ella dijo:
'Yo no necesito a su Jesús.'
Una semana después, muerió en su departamento
Bon Scott(Cantante)
El ex-vocalista del AC/DC. En una de sus canciones de 1979, él cantó:
No me detenga, yo estoy bajando todo el camino, bajando por la carretera al infierno'.
El 19 de febrero de 1980, encontraron a Bon Scott, ahogado por su propio vómito.
Campinas (EN 2005)
En Campinas, Brasil, un grupo de amigos borrachos, fue a recoger a una amiga.....
La madre la acompañó al automóvil y estaba tan angustiada
sobre la embriaguez de sus amigos y le dijo a la hija , sosteniendo su
mano, ya sentada en el automóvil:
'Mi hija, Vaya Con Dios y permita que Él la Proteja..
Ella respondió: 'Sólo Si Él (Dios) viaja en el maletero, porque aqui
dentro ya está Lleno '
Horas después, en las noticias dijeron que hubo un
fatal accidente, todos habían muerto, el automóvil no podría
reconocerse, pero sorprendentemente, el maletero estaba
intacto.La policía dijo que de ninguna manera el maletero
podría permanecer intacto
Christine Hewitt (Periodista jamaiquina y animadora) dijo:
La Biblia (la Palabra de Dios) fue el peor libro escrito en la vida.
En junio del 2006 ella murió quemada imposible de ser reconocida en su
carro'Señor, yo te amo y te necesito, entra en mi corazón, y bendíceme a mí,
mi familia, mi casa, y mis amigos, en el nombre de Jesús. Amén.'

miércoles, 20 de agosto de 2008

¿Y SI ES VERDAD ESTO? ...HUY






es un testimonio real de lo que es el infierno lo puedes descargar solo con unos clicks LA DESCARGA DEPENDIENDO DE TU CONEXION DE INTERNET PUDE DURAS DE 5 A 15 MINUTOS

viernes, 8 de agosto de 2008

FRASES BIBLICAS


Biblia, libro mío, libro en cualquier tiempo y en
cualquier hora, bueno y amigo para el corazón, fuerte,
poderoso compañero. Tu desnudez asusta a los hipócritas
y tu pureza es odiosa a los libertinos.

(Gabriela Mistral)
No hay filosofía más sublime que la conocida
con el nombre de Sagrada Escritura.

(Isaac Newton)

El pecado te aleja de este libro,
Este libro te alejará del pecado.

(Dwight L. Moody) Estoy ventajosamente ocupado en la lectura de la Biblia.
Del contenido total de este libro razona lo que
puedas y el resto acéptalo por fe, y vivirás
y morirás siendo un hombre mejor.

(Abraham Lincoln) http://bibliahoy.en.eresmas.com/16fraseb.htm

martes, 8 de julio de 2008

Una Revelacion Divina del cielo I parte


Una Revelacion Divina
del Cielo
por Mary Katherine Baxter

Mensaje de Jesús a Kathryn
“Tu has nacido con este propósito, el de escribir y relatar lo que te he mostrado y lo que te he dicho, porque estas cosas son fieles y verdaderas. "Tu llamamiento es hacer saber almundo que hay un cielo y que hay un infierno y que yo, Jesús fui enviado por el Padre para salvarlos del tormento y prepararles un lugar en el cielo.”

Dentro del las puertas
Dios en su misericordia y gracia infinitas, me permitió ir a ese hermoso lugar llamado “cielo”. La logística de mi viaje a su morada y de mi regreso a la tierra me resulta poco clara, pero no me puedo equivocar en cuanto a la realidad de lo que me sucedió.
¿Cómo fueron reveladas las maravillas incomparables del cielo a una simple mortal como yo? Permítanme comenzar con el principio.
Una noche el Señor se me apareció y me dijo que me había elegido para una misión especial. Me dijo: “Hija mía, yo me manifestaré a tí a fín de trasladar a las personas de las tinieblas a la luz. Te he elegido con un propósito: tienes que escribir y hacer un registro de las cosas que te mostraré y te diré.”
Me sometí completamente a Dios y comenzaron a suceder cosas asombrosas. Fui tomada de donde estaba en ese momento y trasportada al mismo infierno. Tenía el uso de mis cinco sentidos, podía ver, palpar, oír, oler y gustar. No obstante, se trataba de un acontecimiento sobrenatural. Me daba cuenta de que el impacto que hacía en mí tenía una finalidad.
Durante días, después de haber sido yo llevada por el Señor al infierno, estuve muy dolida en mi alma. Mi corazón estaba triste y apesadumbrado debido a los horrores que había presenciado. Había visto el juicio de Dios sobre el pecado y sobre la gente que había ido al infierno. Yo oraba encarecidamente a Dios y procuraba su consuelo.
Después de 31 días de haber empezado estos sucesos, el poder del Dios omnipotente volvió a caer sobre mí. A las dos de la mañana, un vigoroso ángel se presentó junto a mi cama. Jesucristo se hallaba de pie detrás de aquel ángel. Al mirar yo el rostro del Señor, vi que me sonreía pero no me decía nada.
El poderoso mensajero de Dios me dijo: “Dios me ha dado una misión especial. He sido enviado acá para llevarte al cielo y mostrarte parte de este.”
Volvió a hablar después de un rato: “ y mira la gloria de Dios!”
Enseguida, y de forma sobrenatural, fui trasportada de mi casa y me hallé parada junto al ángel celestial frente a una de las puertas del cielo.
¡La abrumadora belleza de lo que veía a mí alrededor era fascinante! La ropa del ser celestial parecía una vestidura resplandeciente de luz. El ángel tenía alas triangulares que relucían con los colores del arco iris. Aunque yo no estaba sorprendida, sí quedé asombrada por la hermosura indescriptible de Dios que era evidente por todas partes.
Acto seguido, el ángel repitió una exclamación que yo oiría muchas veces: “ la gloria de Dios!”
La magnífica puerta que estaba ante mí en su es plendor estaba hecha de una perla sólida.
Con admiración contemplé todo lo que pude de ese hermoso panorama. Hasta ese punto, no había visto al Señor por ninguna parte, mas me hallaba totalmente extasiada por la gloria del cielo.



LA ENTRADA EN EL CIELO
Cuando llegamos allí, dos ángeles de gran estatura estaban fuera de la puerta. Ambos llevaban vestiduras relucientes y tenían una espada en la mano. La cabellera de ellos era como de hilos de oro y sus rostros resplandecían.
El ángel que me acompañaba se apartó para hablar con los dos ángeles que vigilaban la puerta y me dejó sola. Con asombro pensé: “ qué gloriosas son las puertas del cielo! ¡Qué maravilloso es poder ver esto personalmente!”
De repente, me di cuenta de que iba a entrar realmente en el cielo.
Al mirar a los ángeles del Señor, pude oír parte de la conversación que sostenían. Uno de ellos entró por la puerta y regresó casi de inmediato con un pequeño volumen. El libro tenía una cubierta de oro, y lo que estaba impreso adentro también era de oro. Parecía que era un libro con la historia de mi vida. Mi nombre estaba
estampado en la cubierta: Mary Kathryn Baxter
En el rostro de los ángeles se esbozó una sonrisa de aprobación. Abrieron el libro, se miraron y entonces dijeron con una voz que pude oír: “Ella puede entrar por la puerta.”
Mi ángel guía me escoltó a través de la magnífica puerta y entré en el cielo.
De pronto, todo el ambiente se llenó de música. Me sentí rodeada por ella. Estaba por encima de mí. Parecía como si penetrara todo mi ser. Una poderosa ola tras otra de hermosa música y cantos bañaban el paisaje y parecía que lo envolvían todo y a todos.
El asombro volvió a dejarme sin aliento cuando entré en la ciudad. El paisaje de esa ncomparable ciudad estaba más allá de la descripción. A mi alrededor se hallaban las flores más bonitas y coloridas que yo jamás había visto.
Por todas partes había un verdor y vegetación increíbles. Incluso las flores de las plantas parecían reaccionar a la música y al canto.
La música continuaba girando alrededor mío. Parecía como si yo formara parte de aquello.
Una cosa es intentar describir las maravillas de esa ciudad, otra bastante distinta, es saber que uno compartirá la alegría de ella.
Ví algunos de los ciudadanos exuberantes del cielo y todos vestían túnicas. Esta cita bíblica vino a mi mente:
(Isaías 61:10)"En gran manera me gozaré en Jehová, mi alma se alegrará en mi Dios; porque me vistió con vestiduras de salvación, me rodeó de manto de justicia, como a novio me atavió, y como a novia adornada con sus joyas".
La felicidad y la alegría que refulgía del rostro de ellos sobrepasa cualquier comparación.
El cielo es un lugar real. No es el figmento de alguna imaginación. En la Biblia aparece registra do que Jesús dijo(Juan 14:1-2):
"1 No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí.
2 En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros".
El cielo es un lugar preparado para gente preparada. Puesto que nosotros como hijos de Dios hemos sido trasformados y hechos nuevas criaturas por el milagro de la regeneración, y puesto que ahora somos nuevas criaturas en Cristo, es un gozo saber que el lugar en que pasaremos la eternidad ha sido preparado por el Salvador que nos redimió.
El cielo es un lugar perfecto. Puesto que nuestro Salvador es perfecto, omnipotente y eterno, el cielo tiene también que ser un sitio perfecto. Puesto que Él nos está preparando un lugar allí para que vivamos con Él por toda la eternidad, también nuestra casa eterna será perfecta. Nada echará a perder jamás ninguna parte de esa morada celestial. Nunca se permitirá en trar nada en el cielo que pueda profanarlo o estropearlo.
(Apocalipsis 21:27) "no entrará en ella ninguna cosa inmunda, o que hace abominación y mentira, sino solamente los que están inscritos en el libro de la vida del Cordero".
El cielo está fuera del alcance del pecado y de los pecadores de todo tipo y descripción. Se excluirá a satanás para siempre de ese lugar celestial.
(Apocalipsis 12:3-4, 7-10, 12-13) También apareció otra señal en el cielo: he aquí un gran dragón escarlata, que tenía siete cabezas y diez cuernos, y en sus cabezas siete diademas; y su cola arrastraba la tercera parte de las estre llas del cielo, y las arrojó sobre la tierra. Yel dra gón separó frente a la mujer que estaba para dar a luz, a fin de devorar a su hijo tan pronto como naciese.
7 Después hubo una gran batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles luchaban contra el dragón; y luchaban el dragón y sus ángeles;no prevalecieron, ni se halló ya lugar para ellos en el cielo.
9 Y fue lanzado fuera el gran dragón, la serpiente antigua, que se llama diablo y satanás, el cual en gaña al mundo entero; fue arrojado a la tierra, y sus ángeles fueron arrojados con él.
10 Entonces oí una gran voz en el cielo, que decía: Ahora ha venido la salvación, el poder, y el reino de nuestro Dios, y la autoridad de su Cristo; por que ha sido lanzado fuera el acusador de nuestros hermanos, el que los acusaba delante de nuestro Dios día y noche.
2 Por lo cual alegraos, cielos, y los que moráis en ellos. ¡Ay de los moradores de la tierra y del mar! porque el diablo ha descendido a vosotros con gran ira, sabiendo que tiene poco tiempo.
Y cuando vio el dragón que había sido arrojado a la tierra, persiguió a la mujer que había dado a luz al hijo varón.
¡Esa serpiente, satanás, y sus huestes impías no alzarán jamás su fea cabeza en el clima puro y santo del cielo!
Los demonios no pueden entrar en el cielo. Los ángeles caídos que se rebelaron contra Dios y “no guarda ron su dignidad, sino que abandonaron su propia morada” (Judas 1:6) no pueden regresar al cielo.
No faltará nada en el cielo. No se omitirá ningún detalle que contribuya a que su entorno sea perfecto.
Dondequiera que vayamos en la tierra, no importa dónde vivamos o cuán lujosa pueda ser nuestra mansión, siempre tendrá fallas y defectos obvios que impedirán que sea perfecta. En contraste, Dios no ha cometido fallas al construir el lugar llamado “cielo”. Su gloria, sus bellezas, sus maravillas sobrepasan la capacidad humana para describirlo. Es maravilloso contemplar el esplendor indescriptible de ese hermoso lugar.
El brillo combinado de la luz del Hijo de Dios al reflejarse en los muros de jaspe, las puertas de perla, las innumerables mansiones y el hermoso río de la vida crea una escena que ningún artista podría jamás re presentar adecuadamente.
HOGAR DE ALMAS REDIMIDAS
El cielo es un lugar permanente. Ningún enemigo podrá conquistar jamás el paraíso de Dios.
No habrá desmoronamiento de sus edificios, decadencia de sus materiales, ni secamiento o muerte de su vegetación. Ninguna niebla o radiación contaminará jamás su atmósfera santa.
Esa morada permanente es una ciudad eterna y perdurable. Cantemos este himno escrito por Hattie Bueli:
Una tienda o una choza, ¿qué puede importarme? Me están construyendo un palacio allá arriba; Aun cuando me encuentre yo exiliado de Él, Todavía puedo cantar:
A Dios toda gloria, soy hijo del Rey.
En ese lugar incomparable, los santos encontrarán dulce liberación de todas sus decepciones, angustias, tragedias y desastres. Allí no habrá más pena ni aflicción. Allí no habrá más dolor. Allí no habrá más clamor:
(Apocalipsis 21:4)
“Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos;y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor;porque las primeras cosas pasaron.
Parecía que los ciudadanos alegres a los que veía en el cielo habían provenido de muchas edades y países diferentes. Era obvio que habían diferentes nacionalidades. Entonces recordé otra cita bíblica que había leído:
(Apocalipsis 5:9)Y cantaban un nuevo cántico, diciendo: Digno eres de tomar el libro y de abrir sus sellos; porque tú fuiste inmolado, y con tu sangre nos has redimido para Dios, de todo linaje y lengua y pueblo y nación.

OCUPADOS EN ALABAR A DIOS
¡Con emoción mi alma alabó la majestad de Dios! Las penas y la aflicción que yo había experimentado cuando vi la revelación del infierno ahora parecían muy lejanas. Ésta de ahora era una revelación del cielo.
Vi a familias enteras juntas. Todos estaban felices, yendo a algún sitio, haciendo algo, sonriendo. Una refulgencia agraciaba cada rostro que veía.
Parecía que todos los santos del cielo estaban ocupados. Jamás estaban ociosos. Empleaban su tiempo en alabar y engrandecer a Dios. Había cánticos en los labios de todos. El ambiente de la música era el tono dominante.
No pasaremos la eternidad en ocio y pereza, como algunos han equivocadamente representado nuestro destino final. Haremos más que flotar en una nube, tocar un arpa o menear los dedos de los pies en el río de la vida. Nuestro tiempo se empleará en servir a Dios. No sabemos cuál ha de ser la naturaleza de ese servicio, pero no puede haber duda de que su pueblo lo servirá.

DIAMANTES PARA LOS GANADORES DE ALMAS
¡Podía ver por todas partes exquisitos diamantes que brillaban y relucían! Algunos eran tan grandes como bloques de cemento.
Algunos de esos diamantes parecían ser para las mansiones de los que habían sido ganadores de almas en la tierra. Parecía que cada vez que alguien llevaba un alma a Cristo, el cielo le otorgaba un diamante a ese cristiano fiel. La Biblia dice:
(Proverbios 11:30) El fruto del justo es árbol de vida; Y el que gana almas es sabio.
(Daniel 12:3)Los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento;y los que enseñan la justicia a la multitud, como las estrellas a perpetua eternidad.
Según bebía del esplendor y la magnificencia de ese lugar glorioso, vi a un ángel inmenso y hermoso que venía bajando por una vereda. En sus manos sujetaba un rollo con bordes de oro.
El ángel puso el rollo en una mesa de pedestal, que era de un material plateado diferente a cualquier cosa que yo hubiera visto antes. La mesa oblonga literalmente refulgía con luz.
El rollo tenía un nombre escrito en él. Uno de los santos lo tomó y comenzó a leerlo.
“Jesús es el maestro de obra”, me dijo un santo del cielo. “Él determina quién merece los diamantes y a dónde han de ir. Este rollo que he tomado es un informe de la tierra de una persona que llevó a alguien a Jesús, que aumentó a los pobres, que vistió a los desnudos, que hizo grandes cosas para Dios.”
(Mateo 25:31-41, 46)31 Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará en su trono de gloria,32 y serán reunidas delante de él todas las naciones; y apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos.
Y pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda. Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí. Entonces los justos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos, o sediento, y te dimos de beber?
38 ¿Y cuándo te vimos forastero, y te recogimos, o desnudo, y te cubrimos? ¿O cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y vinimos a ti?
40 Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis. 41 Entonces dirá también a los de la izquierda: "Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles.
46 E irán éstos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna.

ESPACIO PARA TODOS
El ángel me repitió el mensaje de bienvenida: “Ven y mira la gloria de tu Dios.”
Conforme a la dirección del Señor, hago un registro de esta descripción del cielo tal y como lo ví. Necesita mos comprender que el enfoque de nuestras esperanzas y deseos debe estar en pasar toda la eternidad con nuestro Señor.
¡El cielo es la tierra de los sueños hecha realidad!
Me emociono en cuanto al cielo porque después de que terminen nuestra obra y trabajos sobre la tierra, nos iremos de este mundo e iremos allá. Dios ha preparado la ciudad, y Jesús está preparando un lugar allí para los que lo amamos.

COMUNIÓN PERFECTA
En el cielo se restablecerá totalmente una ininterrumpida comunión entre Dios y el hombre.
Cuando Adán y Eva estaban en el huerto del Edén, Dios visitaba esta tierra.
Después que la comunión con Él fuera arruinada por el pecado y la desobediencia, Dios continuó mostrando su deseo de tener comunión con la humanidad.
Su última expresión de amor por la humanidad fue dar a su propio Hijo para que sufriera una muerte inclemente en una cruz cruel. Mediante la muerte y resurrección de Cristo, la comunión entre Dios y el hombre se convirtió de nuevo en una posibilidad.
Incluso ahora, las circunstancias de la vida pueden impedir nuestra comunión íntima con Dios.
Pero allá en el cielo no habrá más impedimentos. Conoceremos la comunión verdadera con el Rey de reyes y Señor de señores. La comunión con Él será plena.
El cielo es la morada del Dios vivo. Está mucho más allá de los cielos atmosféricos y más allá de los planetas y las galaxias. Es la mansión perpetua de “los redimidos de Jehová” (Isaías 62:12). Es el destino eterno de todos los hijos de Dios mediante la fe en Cristo.
No necesitamos temer que nos ubiquen en un diminuto departamento en el cielo al que le hayan colocado el rótulo de “mansión”. Cuándo los redimidos de todos los tiempos seamos llevados a nuestro hogar en la gloria, allí habrá espacio suficiente para todos nosotros para que tengamos una de las muchas mansiones, de las muchas moradas, que Jesús dijo que estaba preparando para nosotros en la casa de su Padre:
(Juan 14:1-4)
1 No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. 2 En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. 3 Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis. Y sabéis a dónde voy, y sabéis el camino.
El cielo seguramente tiene espacio para todos:
Después de esto miré, y he aquí una gran multi tud, la cual nadie podía contar, de todas naciones y tribus y pueblos y lenguas, que estaban delante del trono y en la presencia del Cordero, vestidos de ropas blancas, y con palmas en las manos;
(Apocalipsis 7:9-11)10 y clamaban a gran voz, diciendo: La salvación pertenece a nuestro Dios que está sentado en el trono, y al Cordero. 11 Y todos los ángeles estaban en pie alrededor del trono, y de los ancianos y de los cuatro seres vi vientes; y se postraron sobre sus rostros delante del trono, y adoraron a Dios.
LÁGRIMAS EN EL CIELO
Luego fui llevada a un lugar en particular en que el ángel se detuvo y me dijo: “Dios quiere que te muestre la habitación de las lágrimas.”
Muchas veces, puede que ustedes hayan leído varios pasajes en el libro de los Salmos acerca de nuestras lágrimas y sobre cómo se ocupa Dios de nosotros. Los ángeles captan nuestras lágrimas y las meten en redomas o sea, vasijas
(Salmo 56:8). Muchas veces, me había preguntado qué significaba eso.
Sé que muchos de ustedes que leen estas palabras han vertido muchas lágrimas por sus seres queridos: sus hijos, su cónyuge o sus parientes. Especialmente, si la persona ha pasado por una separación o por un divorcio, ha sentido como si se hubiera esfumado toda esperanza. Ustedes se han afligido por los seres queridos que han perdido.
Quiero decirles que Dios me mostró una habitación de lágrimas. Era tan bella. El ángel me condujo a un gran vestíbulo que no tenía puerta.
Al mirar en su interior, pude ver que la habitación misma no era muy grande, pero la santidad y el poder que irradiaba de allí, me asombró. Amueblada con estantes de cristal, las paredes interiores brillaban con luz.
En los estantes habían muchas vasijas, algunas de las cuales estaban en grupos de a tres y parecían ser de cristal transparente. Debajo de cada conjunto de vasijas brillantes semejantes al cristal había una placa con un nombre en él. Había muchas de estas vasijas en la habitación.
Entonces, ví a un hombre dentro de la habitación que parecía haber sido glorificado. Su túnica, de color morado oscuro, era muy bonita y parecía de terciopelo.
Justamente a la entrada había una elegante mesa, hecha de un material valioso, la cual refulgía con majestuoso resplandor. ¡La esplendorosa escena que ví me asombró!
En la mesa habían libros que parecían como si hubieran sido cosidos con el más bello género, parecido a la seda, que jamás yo hubiera visto. Algunos tenían diamantes, perlas y encajes; otros tenían gemas verdes y moradas. Todos habían sido hechos de forma elaborada.
Pensé: “ Dios, qué bellos son estos libros!” Me encantan los libros. Éstos, en particular, me atraían. Eran asombrosos. Al contemplarlo todo, me sentí maravillada.
De pronto, el hombre de la habitación me dijo: “Ven y mira. Quiero mostrarte esta habitación y explicarte acerca de las lágrimas. Esta es una de muchas habitaciones iguales. Estoy a cargo de ésta.”
Según él hablaba, pasó un ángel enorme por el vestíbulo. La belleza y majestad de aquel ser celestial me asombró. Me dí cuenta de que vestía una vestidura blanca, reluciente, con reborde de oro por toda la parte delantera. Parecía medir cerca de doce pies de estatura y tenía alas muy grandes.
El ángel tenía una pequeña copa en las manos. La copa dorada estaba llena (véase Apocalipsis 5:8) de un líquido. El hombre de la habitación me dijo: “Él me acaba de traer una copa de lágrimas de la tierra. Deseo que veas lo que hacemos acá con ellas.”
El ángel le entregó la copa, junto con un pedazo de papel. La nota tenía el nombre de la persona cuyas lá grimas estaban en la copa.
El hombre de la habitación leyó la nota y entonces se dirigió a uno de los lugares en que se guardaban las vasijas. Leyó la placa debajo de la vasija y yo sabía que coincidía con la persona de la tierra cuyo nombre venía en la nota.
El hombre tomó la vasija, que estaba casi llena, y la acercó a la copa. Vertió entonces las lágrimas de la copa dorada en la vasija.
“Quiero mostrarte lo que hacemos aquí”, me dijo el hombre. “Cuéntaselo a la gente de la tierra.” Entonces llevó la vasija hacia la mesa, tomó uno de los libros, lo abrió, y dijo: “
Las páginas del libro estaban totalmente en blanco. El guardián de la habitación me dijo: “Éstas son las lágrimas de los santos de Dios en la tierra según claman a Dios. Mira lo que sucede.”
Entonces, el hombre vertió una gota de la vasija, una lagrimita, en la primera página del libro. Al hacerlo, comenzaron a aparecer palabras inmediatamente. Bellas palabras, elegantemente escritas, comenzaron a aparecer en la página. Cada vez que una lágrima caía en una página, aparecía una página entera de escritura. Continuó haciéndolo página tras página, vez tras vez.
Al cerrar el libro y hablar, parecía estar diciéndole a toda la humanidad lo mismo que a mí: “Las oraciones más perfectas son aquellas que están bañadas con lá grimas que salen del corazón y el alma de los hombres y las mujeres de la tierra.”
Entonces el ángel con alas de arco iris me dijo:
“Ven y mira la gloria de Dios.”
DIOS ABRIÓ EL LIBRO
De pronto fuimos trasportados a un lugar enorme en el que habían miles y miles de personas y seres celestiales. ¡Oh, qué belleza!
Al poco tiempo pareció como que la gente desaparecía y comenzaba a aparecer por todas partes una manifestación incluso mayor de la gloria de Dios. Las grandes alabanzas a Dios se tornaron atronadoras.
El mensajero angelical me llevó hasta el trono de Dios. Ví una enorme nube, una neblina, y ví una imagen del Ser de la nube. No pude ver el rostro del Señor, pero ví su gloria y un arco iris por encima del trono. Oí la voz de Dios y me sonó como la describió Juan(Apocalipsis 14:2).: “Y oí una voz del cielo como estruendo de muchas aguas, y como sonido de un gran trueno; y la voz que oí era como de arpistas que tocaban sus arpas” En este poderoso anfiteatro, vi muchos caballos con jinetes al rededor del trono.
De repente, vi un libro que estaba sobre el enorme altar delante del trono de Dios. Vi a los ángeles postrarse ante Él. Estando yo de pie, admirada, miré esa escena, y vi lo que parecía la mano de un hombre salir fuera de la nube y abrir el libro.
De algún modo, yo sabía que lo que abría el libro era la mano de Dios.
Asombrada, vi subir del libro lo que parecía humo. De repente, el perfume más agradable que jamás hubiera olido cundió la zona entera donde yo me hallaba. El ángel me dijo que ese libro contenía las oraciones de los santos, y que Dios enviaba a sus ángeles a la tierra para contestar las oraciones del clamor del corazón de ellos. Todos alababan y engrandecían a Dios.
Al abrir Dios el libro, sus páginas comenzaron a salir del volumen y a volar hacia las manos de los ángeles a caballo. Pude escuchar su voz, “como la voz de un fuerte trueno”, clamar y decir: “ a contestar las oraciones de él! ¡Vayan a contestar las oraciones de ella!”
(Salmo 56:8-11)8 Mis huidas tú has contado; pon mis lágrimas en tu redoma; ¿No están ellas en tu libro? Serán luego vueltos atrás mis enemigos, el día en que yo clamare; esto sé, que Dios está por mí.
10 En Dios alabaré su palabra; en Jehová su pala bra alabaré.
11 En Dios he confiado; no temeré; ¿qué puede hacerme el hombre?
La Palabra viva de Dios nos explica lo que Él hace con nuestras lágrimas. ¡Qué hermoso es entender la gloria y la maravilla de nuestro Dios! ¡Qué maravilloso resulta ser receptores de su compasión! A Él le interesan incluso nuestras lágrimas.
Muchas citas bíblicas nos hablan acerca de nues tras lágrimas, acerca de nuestras aflicciones y acerca del consuelo de Dios para nosotros. Léalas y regocíjese:
(2 Reyes 20:5)Vuelve, y di a Ezequías, príncipe de mi pueblo: Así dice Jehová, el Dios de David tu padre: Yo he oído tu oración, y he visto tus lágrimas; he aquí que yo te sano; al tercer día subirás a la casa de Jehová.
(Salmo 6:6-9)6 Me he consumido a fuerza de gemir; todas las noches inundo de llanto mi lecho, riego mi cama con mis lágrimas.
7 Mis ojos están gastados de sufrir; se han enveje cido a causa de todos mis angustiadores.
8 Apartaos de mí, todos los hacedores de iniquidad; porque Jehová ha oído la voz de mi lloro. 9 Jehová ha oído mi ruego; ha recibido Jehová mi oración.
(Salmo 116:8)
8 Pues tú has librado mi alma de la muerte, mis ojos de lágrimas, y mis pies de resbalar.
(Salmo 126:5-6)5 Los que sembraron con lágrimas, con regocijo se garán. 6 Irá andando y llorando el que lleva la preciosa semilla; mas volverá a venir con regocijo, trayendo sus gavillas.
(Isaías 25:8)8 Destruirá a la muerte para siempre; y enjugará Jehová el Señor toda lágrima de todos los rostros; y quitará la afrenta de su pueblo de toda la tierra; porque Jehová lo ha dicho.
(Jeremías 31:16)16 Así ha dicho Jehová: Reprime del llanto tu voz, y de las lágrimas tus ojos; porque salario hay para tu trabajo, dice Jehová, y volverán de la tierra del enemigo. (Apocalipsis 7:17)17 Porque el Cordero que está en medio del trono los pastoreará, y los guiará a fuentes de aguas de vida; y Dios enjugará toda lágrima de los ojos de ellos.
(Apocalipsis 21:4)4 Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor;porque las primeras cosas pasaron.
(Isaías 35:10)10 Y los redimidos de Jehová volverán, y vendrán a Sion con alegría;y gozo perpetuo será sobre sus cabezas; y tendrán gozo y alegría, y huirán la tristeza y el gemido.
¡Gloria a Dios, el cielo es un lugar genuino! Iremos realmente allí. Y, cuando vayamos al cielo, no seremos vapores de humo que floten en una nube. Una de las cosas maravillosas acerca del cielo es que nuestras lágrimas y aflicciones serán reemplazadas por alegría eterna, tal como se promete en la Pala bra de Dios. No obstante, ¡todavía hay mucho más!

El TRONO DE DIOS
El cielo es un lugar real. Es un destino literal. No es ningún sueño efímero o visión imaginaria. Dios nos ha revelado a todos en las Sagradas Escrituras muchas de las realidades del cielo.
EL PRIMER CIELO
Primero hay un cielo atmosférico. Se trata de la atmósfera alrededor de la tierra. Es donde vuelan los pájaros y los vientos soplan. Es donde se forman los chubascos, las tormentas, la neblina, los vapores y las nubes.
El primer cielo es el sitio al cual se refería el ángel en Hechos 1:11 cuando le preguntó a los discípulos por qué estaban “mirando al cielo”. Jesús, cuando le habla ba a su Padre, levantaba “los ojos al cielo” (Juan 17:1).
EL SEGUNDO CIELO
Luego está el cielo del espacio. Esa es la región del Sol, la Luna y las estrellas. Se menciona en muchos lugares en la Biblia, algunos de los cuales se dan aquí:
(Génesis 22:17)17 De cierto te bendeciré, y multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo y como la arena que está a la orilla del mar;y tu descendencia po seerá las puertas de sus enemigos.
(Deuteronomio 4:19)19 sea que alces tus ojos al cielo, y viendo el sol y la luna y las estrellas, y todo el ejército del cielo, seas impulsado, y te inclines a ellos y les sirvas; porque Jehová tu Dios los ha concedido a todos los pueblos debajo de todos los cielos.
(Job 38:31-33)31 ¿Podrás tú atar los lazos de las Pléyades, o desatarás las ligaduras de Orión?
32 ¿Sacarás tú a su tiempo las constelaciones de los cielos, o guiarás a la Osa Mayor con sus hijos?
¿Supiste tú las ordenanzas de los cielos? ¿Dis pondrás tú de su potestad en la tierra?
(Isaías 13:10) 10Por lo cual las estrellas de los cielos y sus luceros no darán su luz; y el sol se oscurecerá al nacer, y la luna no dará su resplandor.
(Mateo 24:29)
29 E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas.
EL TERCER CIELO
Es el destino de los justos. No obstante, se encuentra más allá de la atmósfera y del cielo estrellado. Es el lugar al que se refería el apóstol Pablo cuando escribió:
(2 Corintios 12:2 vp). “Conozco a un seguidor de Cristo, que hace catorce años fue llevado al tercer cielo El cielo, como lo utiliza la autora a lo largo de este libro, es la región de la que se habla a menudo como la presencia inmediata de Dios:
(Hebreos 9:24)
24 Porque no entró Cristo en el santuario hecho de mano, figura del verdadero, sino en el cielo mismo para presentarse ahora por nosotros ante Dios; El cielo es donde vive Dios. Cuando Jesús nos ense ñó a orar nos dijo que lo hiciéramos al “Padre nuestro que estás en los cielos” (Mateo 6:9).
En 1 Reyes 8:30, al cielo se lo llama el lugar en que vive Dios. En Salmo 11:4, se lo llama el templo santo de Dios y el lugar en que está su trono.
Allí, en el templo de la majestad divina de Dios, se revela su excelsa gloria de la manera más evidente. Es un lugar sagrado de luz, alegría y gloria. No sabemos exactamente dónde está ubicado, pero a menudo se in dica el cielo en la Biblia como que está “arriba”.
Sabemos que el Dios todopoderoso está en el cielo. Allí, el Padre y Jesucristo son el enfoque central de los santos, los ángeles y todos los seres que lo adoran.
¡Qué gloriosa compañía hay en el cielo! Allí están los ángeles, porque Jesús dijo (Mateo 18:10). “Mirad que no menospreciéis a uno de estos pequeños; porque os digo que sus ángeles en los cielos ven siempre el rostro de mi Padre que está en los cielos”.
Allí están los redimidos, pues Jesús nos prometió (Juan 14:3) “ donde yo estoy, vosotros también estéis”. Se nos dice en 1 Pedro 1:4 que se ha reservado una herencia para nosotros en el cielo que es incorruptible, inmarcesible y que no desaparecerá.
Hermanos, me entusiasmo cuando testifico acerca de mi hermosa visita al cielo. Me emociono al describir las cosas que ví y los seres que conocí.
LA ALABANZA DEL CIELO
Después que el ángel de Dios me mostró la habitación de las lágrimas, repitió el estribillo que le escuché decir tan a menudo a lo largo de mis visitas al cielo:
“y mira la gloria de tu Dios!”
El esplendor radiante y magnífico del cielo me abrumó. Los efluvios de gloria que parecían surgir de todo lo que veía me llenaban de admiración. La belleza y gloria de esa hermosa tierra no puede ser descrita con precisión por el ojo de la mente a menos que la persona la haya visto personalmente.
En ese momento me vinieron a la mente las pala bras que una vez había yo oído citar a alguien:
La luz del cielo
Es el rostro de Jesús.
El gozo del cielo
Es la presencia de Jesús.
La armonía del cielo
Son las alabanzas a Jesús.
El tema del cielo
Es la obra de Jesús.
La ocupación del cielo
Es el servicio a Jesús.
La plenitud del cielo
Es Jesús mismo.
Según iba yo en compañía del ángel, pude percibir por todas partes gozo, paz y felicidad. Mis pensamien tos volaron hacia mi familia en la tierra, y pareció que el ángel los leyó, pues me dijo: “Tienes una misión que cumplir para Dios. Les tienes que decir a las personas de la tierra lo que hay acá arriba. Dios te está mostrando parte del cielo, aunque no todo. Ven y mira la gloria de tu Dios.”
Cuando llegamos a nuestro destino, pude oír muchas, muchas voces cantarle alabanzas a Dios. La magnífica música de los adoradores del cielo llenaba mi alma de emoción. Las expresiones de honra y gloria hacían eco repetidas veces en la vasta expansión del cielo según los serafines y los redimidos cantaban con vehemencia himnos de alabanza.

APROXIMACIÓN AL TRONO
Mi alma se llenó de emoción y de alegría. De algún modo supe que nos acercábamos al trono de Dios.
El ángel que me guiaba se detuvo a gran distancia del trono de Dios. Pude entonces tener una visión panorámica de lo que allí ocurría. Ví la misma escena que vió Juan en la visión que describió en Apocalipsis:
(Apocalipsis 5:11)
11 Y miré, y oí la voz de muchos ángeles alrededor del trono, y de los seres vivientes, y de los ancianos; y su número era millones de millones, ¡Oh, moradores de la tierra, si sólo pudieran percatarse de lo que Dios tiene reservado para los que lo amamos!
Según miraba yo fijamente y con arrobamiento la escena ante mí, sucedió algo incluso más maravilloso. Pude oír a todo volumen las miles y miles de voces que alababan a Dios. Entonces, maravilla de maravillas, el ángel me permitió mirar lo que siempre había yo deseado ver, el trono de Dios.
EL GLORIOSO TRONO DE DIOS
El trono de Dios estaba “alto y sublime” (Isaías 6:1). El río de la vida, que salía de debajo de su base, fluía con toda su belleza y pureza. La gloria de Dios opacaba el trono. Parecía como silos relámpagos, los truenos y las voces estuvieran todos alrededor del trono. Juan, al describir una visión que tuvo del cielo, dijo:
(Apocalipsis 4:5)5 Ydel trono salían relámpagos y truenos y voces;y delante del trono ardían siete lámparas de fuego, las cuales son los siete espíritus de Dios.
Vi un arco iris encima y alrededor del trono, “semejante en aspecto a la esmeralda” (Apocalipsis 4:3). Los brillantes y magníficos matices del arco iris se mezclaban y producían colores intensos y deslumbrantes.
Se trataba de algo diferente de cualquier cosa que jamás hubiera yo visto en la tierra. Los variados colores de luz resplandeciente significaban gloria y poder. Salían del trono llamaradas de esplendor. Rayos de gloria irradiaban de él.
¡Gran parte del cielo parece transparente y esos gloriosos rayos que salen del trono están llenos de una luz que se refleja en todo el paraíso!
No sé cuánto tiempo permanecí en este anfitea tro celestial, pero me sentí abrumada de admiración.
Pensé acerca de los miles que habían venido al cielo y de los muchos miles que vendrían aún. Pensé en la santidad de Dios, en la pureza de su majestad y en la perfección de su Palabra.
Grité en voz alta: “ Dios, qué maravilloso es contemplar tu gloria, tu majestad y tu poder!”
Como antes, el ángel del Señor me dijo: “Ven con migo. Hay muchas otras cosas en el cielo que quiero mostrarte.”
LA HABITACIÓN DE LOS REGISTROS
Me asombré al ver una habitación en la que se llevaban registros meticulosos. El ángel me dijo que Dios hace que sus ángeles mantengan registros de cada servicio el ángel me recordó que yo debería hacer también un registro de estas cosas. Me dijo que habían muchas cosas que eran un misterio para mí, puesto que yo estaba viendo solamente de forma oscura (1 Corintios 13:12). Pero el ángel hizo hincapié en que yo le tenía que contar a la gente de la tierra acerca de las cosas que veía.
Al llegar a otra parte del cielo, bajé la mirada hacia un corredor muy largo. Sus muros eran altos y parecían de platino. Yo podía oír las fuertes alabanzas a Dios sonar fuera continuamente. Me asombré de la brillantez de luz y gloria que reflejaban aquellos muros. Perpleja, pregunté: “ Qué significa esto?” Parecía como que los muros tenían kilómetros de largo. No podía ver el fin de ellos.

EL GRANERO DE DIOS
El ángel que me estaba mostrando estas cosas dijo: “Mira en la parte superior de este muro.” Allí en la parte superior de él estaba grabada la palabra “Granero”.
Cuando le pregunté: “ son estos aposentos?” ¡El ángel me dijo que ellos contenían las bendiciones que estaban almacenadas para el pueblo de Dios!
El cielo es pureza perfecta, y Dios quiere purificar a sus santos en la tierra para que gocen del ambiente del cielo. El cielo es plenitud de gozo, y Dios desea darle gozo a su pueblo en la tierra. El cielo es libertad perpetua, y Dios anhela que su pueblo sea libre mientras esté en la tierra. El cielo es salud perfecta, y Dios quiere que su pueblo sea saludable aquí en la tierra. El cielo es seguridad total y Dios quiere que su pueblo se sienta confiado y seguro aquí en la tierra. El cielo es realización y cumplimiento, y Dios desea que su pueblo se sienta realizado en la tierra.
Cuando Jesús nos dió instrucciones de que oráramos a Dios: “Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra” (Mateo 6:10), nos reveló que Él quiere que tengamos un anticipo del cielo aquí en la tierra.
Hermanos, el Señor tiene graneros de bendiciones justamente para ustedes. Aguardan en el cielo por que se los reclame y se los reciba ahora, aquí en la tierra. Dios quiere salvarlos. Quiere libertarnos. Quiere sanarnos. Quiere que conozcan “la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento” (Filipenses 4:7). Quiere que experimenten una alegría y un “gozo inefable y glorioso” (1 Pedro 1:8).
EL JESÚS SANADOR
“Mira la gloria de tu Dios”, proclamó el ángel. Cuando desapareció, he aquí que Jesús estaba a mi lado.
Miré a Jesús. Ahora me parecía que era más alto que de lo que yo lo había percibido antes. Su brillante túnica era muy elegante y llena de gracia. Las sandalias embellecían sus cicatrizados pies, y su rostro y cabellera eran magníficos y hermosos.
Según lo miraba fijamente, le pregunté: “Jesús, ¿qué son estos aposentos?”
El Señor no me respondió, sino que alzó su mano y la extendió hacia el muro. En ese momento, apareció en éste una gran abertura. Por todos los alrededores de los bordes de la abertura se veían gloria, poder y luz. Lo mismo que los demás objetos, parecía como si este le diera gloria a Dios.
Exclamé: “ Señor, ¿qué significa esto?!”
Me dijo entonces: “Hija mía, éstos son para mi pueblo. Son para los pecadores en la tierra, si solamente creen. Morí para sanarlos.”
Al mirarlo a los ojos, supe que quería que la gente creyera que Él, Jesucristo, había muerto para que pudiéramos ser sanos. Dijo: “Las sanidades están en espera de las personas en la tierra. El día ha de llegar cuando habrá una avalancha de milagros y sanidades sobre la tierra.”
Continuó diciendo: “Hija mía, hasta donde alcanza tu vista, puedes ver estos edificios de suministro o graneros. Las bendiciones que se contienen aquí aguardan por la fe de los que están en la tierra. Todo lo que tienen que hacer es creer y recibirán, creer que soy el Señor Jesucristo y que yo puedo hacerlo, y recibirán mis dones.”
“Cuando vuelvas a la tierra”, subrayó, “acuérdate de que no eres tú quien sanas. No es la vasija la que sana; soy yo. Sólo dí mi Palabra y ora y haré la sanidad. Cree que la puedo hacer.”
Yo grité: “ Gloria a Dios! ¡Aleluya! ¡Gracias, Jesús!” Jesús bajó su mano y la abertura del muro se cerró.
Entonces, el ángel y yo viajamos a gran velocidad hacia otro sitio. Aquí, también pude oír la música y las magníficas exclamaciones del pueblo de Dios. El ángel me dijo: “Hija, el Señor me ha ordenado mostrarte varias cosas. Cuéntaselas a la gente.”
Antes, ahora, y después
En este punto de mi visión, el ángel del Señor comenzó a revelarme cosas acerca de las cuales yo me había hecho preguntas con anterioridad. Me empezó a hablar acerca de un gran misterio.
Me dijo: “Dios ha hablado y tengo que mostrarte lo de antes, lo de ahora y lo de después. Lo que te voy a mostrar te producirá gran emoción. Te voy a mostrar lo que sucede cuando una persona nace de nuevo. Te mostraré cómo en las habitaciones de registro los pecados de un individuo son quitados por medio de la sangre del Cordero.
“Te voy a mostrar lo que ocurre cuando una persona nacida de nuevo muere en la tierra y su alma llega al cielo. Ven y mira la gloria de tu Dios.”
Viajamos desde el cielo velozmente y pronto estu vimos de regreso en la tierra. Pude ver la tierra como en una visión, y al ángel que me dijo: “Mira y observa.”
Conforme el ángel permitió que la visión pasara ante mí, vi una bella iglesita del campo. No sé dónde se hallaba geográficamente el templo, pero era una iglesia rural, en el interior del país.
Con la ayuda del ángel de Dios, se me permitió ver el interior del edificio. Pude ver aproximadamente a unas treinta personas sentadas en los bancos. El pastor detrás del púlpito predicaba basado en este pasaje bíblico:
(Isaías 5 5:6-7)6 Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano.
Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar.
Según miraba yo esta escena fijamente, ví a un vigoroso ángel encima de la iglesia. El ángel guía que estaba a mi lado me dijo: “Un ángel grande es situado en cada iglesia. Ese ángel tiene a su cargo a todos los demás ángeles de esa congregación.”
ÁNGELES EN LA IGLESIA
Dos ángeles con libros estaban situados fuera de la puerta del templo. yo podía ver a la gente entrar y salir del templo. Entonces el ángel guía me hizo señas con su mano y pareció como si el tejado retrocediera y pude mirar adentro.
Había un ángel a cada lado del pastor en el púlpito. Detrás de ellos había dos ángeles más. En total había cuatro ángeles alrededor del púlpito.
Habían dos ángeles en el fondo del templo, detrás de la congregación. Dos más estaban situados a medio camino hacia el frente del pasillo. Arriba, cerca del altar, había dos ángeles más. Así que había bastantes ángeles en el templo y varios de ellos tenían pergaminos y plumas en las manos.
El ángel entonces me dijo: “Quiero mostrarte lo que ocurre.”
El pastor empezó a hablar, y los diáconos comenzaron a recibir la ofrenda. Conforme se ofrendaba, los ángeles registraban las actitudes de la gente al hacerlo. Registraban los pensamientos de los contribuyentes, si se molestaban al dar para la obra del Señor, o si les agradaba dar la ofrenda y la consideraban un acto de adoración. Los ángeles anotaban todo ello en sus libros de registro.
Entonces, los dos grandes ángeles situados en la parte delantera del púlpito asintieron con la cabeza hacia los otros ángeles.
Estas actividades de los ángeles eran invisibles para las personas dentro del templo, pero yo las podía ver con claridad. Entonces mi guía me dijo: “Quiero mostrarte algo más. Mira con atención y serás bendecida.”
De pronto, pareció como que me hubieran trasladado detrás del pastor. Según el predicaba basándose en el versículo 6: “Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamale en tanto que está cercano”, pude ver a una multitud de seres celestiales dentro de la iglesia. Los ángeles se regocijaban durante todo el tiempo en que se celebraba el culto. El ministro estaba ungido al predicar ese mensaje. Uno de los ángeles vertía sobre su cabeza algo que parecía fuego. La gloria de Dios salía de la boca del predicador.
Entonces se abrió una puerta en el fondo del templo, y un hombre en estado ebrio entró tambaleándose. Caminó hasta el final del pasillo y dijo: “Yo soy la persona de la que usted está hablando, pastor. Necesito al Señor. Necesito ser salvo. Soy alcohólico.” Se postró de rodillas ante el altar y empezó a clamar a Dios.
Dos de los diáconos acudieron al altar para ayudarlo. Poniendo los brazos alrededor de él, le preguntaron:
— De veras deseas arreglar tus cuentas con Dios? ¿Realmente quieres ser salvo?
—Sí, quiero ser salvo —respondió el hombre—. Soy alcohólico. Necesito ser libertado.
UN ALMA SE SALVA
De repente aparecieron dos ángeles más. Tenían pergaminos en la mano y empezaron a apuntar lo que el hombre decía. Entonces, los diáconos procedieron a presentarle el plan de salvación al hombre ebrio.
Ví que este hombre estaba lleno de pecados. Sin embargo, según los diáconos iban orando con él, uno de los ángeles tocó su corazón y de su pecho salió un humo asqueroso, tan oscuro como una nube de lluvia.
Cuando ví esto, recordé algunas de los pasajes bíblicos que hablan de los pecados viles que salen del corazón:
El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca buenas cosas;y el hombre malo, del mal tesoro saca malas cosas. (Mateo 12:35)
18 Pero lo que sale de la boca, del corazón sale; y ésto contamina al hombre.
19 Porque del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios, las blasfemias. (Mateo 15:18-19)
Según el hombre empezó a orar a Dios con sus manos alzadas, ví cadenas gruesas negras que lo envolvían. Era esclavo de toda clase de pecados, pero en es pecial del vicio del licor y la embriaguez. Un diácono le dijo: “Debes confesar estos pecados a Dios para que Él te perdone y así puedas ser lavado en la sangre del Cordero.”
Según empezó a confesar sus pecados, un ángel lo tocó. Pude ver fuego salir de las manos del ángel. Las cadenas empezaron a romperse y caerse.
Esto le dió una tremenda libertad al hombre, el cual alzó sus manos y alabó al Señor.
Se puso de pie y ví la gloria de Dios caer sobre él. Sé que el Señor hizo que se le pasara la borrachera, por que empezó a gritar alabanzas al Señor.
Entonces, los dos poderosos ángeles se miraron y asintieron con la cabeza. Ellos regresaron volando por el aire hasta donde estábamos y me dijeron: “Ven y mira la gloria de Dios.”
DE NUEVO EN LAS HABITACIONES DE REGISTRO
Viajamos con mucha rapidez de regreso al cielo acompañados por los otros dos ángeles. Después de entrar por la puerta, fuimos hacia el final de una hermosa vereda que parecía hecha de oro. Fuimos trasportados con rapidez hasta una preciosa habitación.
El ángel me dijo: “Ven y mira lo que hacemos aquí.”
El corredor largo en el que nos hallábamos daba a muchas otras habitaciones similares a aquella en la que estábamos entrando. El ángel dijo: “Hay muchos de estos aposentos en el cielo. Éstas se llaman las habitaciones de registro. Observarás lo que se lleva a cabo en estas habitaciones.”
El ángel dijo: “Estamos llegando a la habitación que contiene el nombre del hombre que termina de convertirse en la tierra.”
En esa habitación, ví que los ángeles provenientes de la tierra rápidamente fueron y le entregaron a otro ángel el informe escrito en un pergamino.
Había colocadas escaleras a lo largo de las paredes de la habitación rectangular. Las paredes estaban cubiertas de estantes y todos los libros estaban dentro de ellos. La escena me recordó una biblioteca de la tierra.
Otros ángeles, que cantaban y alababan a Dios, estaban en fila delante de un gran escritorio de aproximadamente ocho pies de largo por cuatro de ancho.
Había una sección cuadrada en el centro del escritorio, la cual estaba recubierta de oro puro. Era muy bonita. Tallada con hojas y frutas.
Se trataba del escritorio más bello que jamás uno podría imaginar. No he visto nunca nada como él, in cluso un cuadro como él, en la tierra. Me sentí sobrecogida por la gloria y majestad de Dios que había en esa habitación.
Habían ángeles que subían y bajaban por las escaleras. Continuamente sacaban libros de los estantes y los devolvían a sus lugares apropiados. Varios ángeles esperaban en la cercanía con informes de otras partes de la tierra.
Observé que algunos de los libros en la pared tenían tonalidades de color diferentes. Entonces ví a dos de los ángeles de la iglesia que estaban en la fila con un libro que había salido del estante. Contenía precisamente el registro del hombre cuyo nuevo nacimiento terminaba yo de presenciar en la tierra.
El ángel que estaba a mi lado me preguntó:
— Ves a los dos ángeles del culto de la iglesia?
—Sí —le respondí.
— Ves el libro que tienen en sus manos?
—Sí.
—Ese es el libro de registro del hombre que se salvó recientemente. Lo han extraído de los estantes. Ahora deben presentarlo al ángel responsable.
Mi guía me explicó que en cada habitación de registro había un ángel responsable. Todo lo que entra o sale de la habitación pasa ante ese ángel. Y todo se hace con miras a la mayor gloria de Dios.
Me asombré al ver suceder todo esto. El ángel responsable tenía una mitra luminosa que sobrepasa mi capacidad para poder describirla. El tenía una cabellera dorada y una túnica resplandeciente, blanca con mucho oro en ella. Este ángel espléndido tenía unas alas que al abrirse medían aproximadamente doce pies. Se trataba del ángel más hermoso que yo hubiera visto jamás. Ese ángel era el escribano principal de esa habitación.
El ángel responsable me miró e hizo señas de que me le acercara. El poder de Dios me trasladó y llegué con rapidez hasta la diestra del ángel.
Me dijo: “Te ha sido permitido estar aquí a fín de que te podamos mostrar lo que sucede cuando alguien nace de nuevo en la tierra. Se lo tienes que contar a las personas allá.”
¡La maravilla de todo ello me emocionó hasta lo indecible!
MANTENIMIENTO DE REGISTROS
Al mirar delante de mí, las excelsas alabanzas a Dios ascendían por todas partes. Yo podía oír el sonido de campanas, aunque no las podía ver. Ángeles gozosos, sonrientes, magníficos y felices estaban allí con libros en las manos, esperando su turno para hablar con el ángel responsable.
Yo empecé a alabar y a magnificar a Dios de nuevo por su maravilloso poder y sus gloriosos hechos.
— Has visto a los dos ángeles delante del escritorio?—me preguntó mi ángel guía.
—Sí —respondí—. Estaban presentes cuando ese hombre nació de nuevo.
Sacó un mensaje del pergamino; como si se tratara de un marcador en el libro. No podía ver lo que estaba escrito en el papel o en el pergamino. Entonces el ángel me dijo: “Mira lo que está escrito aquí”, y me lo mostró.
El mensaje había sido escrito en una manera ordenada y bella. Ví el nombre del país, del estado, del condado, de la ciudad y de la iglesia.
El ángel me mostró el nombre del pastor y cuántas personas había en el templo.
Me mostró el orden del culto. El registro entero había sido anotado. Me mostró a las personas que participaron en el servicio de la iglesia y los detalles de la ofrenda que se tomó.
El nombre del hombre cuya salvación yo había visto en la tierra había sido registrado en el papel. El mensaje del evangelio del Señor Jesucristo que se predicó para salvar su alma y el tiempo exacto, hasta el segundo preciso, en el que había nacido de nuevo había sido completamente escrito allí. Grité: “ Gloria a Dios!”
Cuando el recuento escrito llegó al lugar en que el hombre repitió la oración del pecador y recibió a Jesucristo como Señor y Salvador, el ángel miró a los otros dos ángeles mensajeros y les preguntó:
— ustedes son testigos de que este hombre nació de nuevo a esta hora?
— Sí—respondieron—, somos testigos. Estábamos presentes. Él recibió a Jesucristo como Señor y Salvador. Lo vimos suceder.
El ruido de la gloria, las alabanzas y los gritos que subieron en ese momento fue asombroso. Todo el cielo magnificó a Dios.
Entonces, el ángel escribió algo en el libro que él mantenía y lo cerró. El libro era muy grueso. Y luego me dijo: “Mira detrás de ti.” Ví a muchas personas, santos redimidos, que llevaban vestiduras blancas adornadas esplendorosamente.
LA SANGRE DE JESÚS
Estos santos redimidos del Dios Altísimo entonaban este cántico:
¡Oh, sólo la sangre de Jesús pudo quitar mis pecados! ¡Oh, sólo la sangre de Jesús Me pudo sanar hoy! ¡Oh, sólo la sangre de Jesús
Me pudo limpiar hoy!
He sido redimido
Por la sangre del Cordero.
Según yo observaba, le dieron el libro del hombre a uno de los santos jubilosos.
Página tras página fueron lavadas de los viejos escritos. Levantaban las páginas una a una y yo podía ver que cada página había sido lavada en la sangre de Jesús. No permaneció ninguno de los pecados de esta persona.
Entonces vino a mi mente este pasaje de Isaías:
(Isaías 43:25)
25 Yo, yo soy el que borro tus rebeliones por amor de mí mismo, y no me acordaré de tus pecados.
Pensé: “ Dios, qué hermoso es que tu Palabra aún sigue vigente! Los pecados de ese hombre fueron lavados por la sangre del Cordero.”
Según yo miraba, le fue dado el libro a otro ángel. Este ser celestial tenía una cabellera larga y hermosa. El libro fue colocado en una bandeja que el ángel llevaba. Los ángeles se saludaban unos a otros y daban gritos de gloria.
El ángel que me acompañaba me dijo: “Ven y mira la gloria de tu Dios.” Empecé a viajar con él a toda velocidad a lo largo de los corredores del cielo.

EL LIBRO DE LA VIDA DEL CORDERO
Me hallé de nuevo ante el trono de Dios. Queridos hermanos, allí se oía el sonido de cuernos y de trompetas. Una nube de gloria, la gloria de Shekinah, iluminaba toda la zona alrededor del trono.
Habían muchos truenos y relámpagos allí. Pude oír una multitud de voces que decían: “Gloria a Dios! ¡Aleluya!”
Contemplé esta poderosa escena. Ví al ángel colocar el libro en el altar de Dios y postrarse. Luego la voz de Dios resonó fuertemente a través del aire; sin embargo entendí cada palabra. Dios dijo: “Otra alma ha sido redimida por la sangre de mi Hijo. Otra persona ha recibido salvación eterna a través de la sangre de mi Hijo.”
¡Sonaron todas las campanas del cielo! ¡Toda la población del cielo gritó! Me postré y comencé a alabar a Dios.
Ví sobre el altar de Dios el libro de la vida del Cordero (Apocalipsis 21:27), y ví una mano salir de esa nube y abrir el libro puesto allí por el ángel. Entonces fue escrito en el libro de la vida del Cordero el nombre del hombre. ¡Gloria a Dios! Hermanos, también nues tros nombres seguramente han sido escritos en el libro de la vida.
Según miraba yo esta poderosa escena, el ángel de Dios me dijo: “Ven y mira la gloria de Dios.” Inmedia tamente fuí de nuevo sacada del cielo a la velocidad de la luz. Conforme acompañaba al ángel, pensé en este pasaje de Isaías:
Y te daré los tesoros escondidos, y los secretos muy guardados, para que sepas que yo soy Jehová, el Dios de Israel, que te pongo nombre.
Por amor de mi siervo Jacob, y de Israel mi escogido, te llamé por tu nombre; te puse sobrenombre, aunque no me conociste. (Isaías 45:3-4)
EL RÍO DE LA VIDA
En la próxima escena ví cuando el Señor ayudaba a los santos del Dios vivo a cruzar el río de la vida. Oh, el río de la vida que fluye del trono de Dios y del Cordero (Apocalipsis 22:1). Al cruzar los santos a través del río de la vida, podía oírlos gritar: “ Gloria a Dios!”
Entonces ví a una incontable compañía de santos a los que se les estaba poniendo las vestiduras más blancas y más espléndidas que yo jamás hubiera visto. Me acordé de que Juan escribió esto:
13 Entonces uno de los ancianos habló, diciéndome: Estos que están vestidos de ropas blancas, ¿quiénes son, y de dónde han venido?
14 Yo le dije: Señor, tú lo sabes. Y él me dijo: Estos son los que han salido de la gran tribulación, y han lavado sus ropas, y las han emblanquecido en la sangre del Cordero. (Apocalipsis 7:13-14)
ANTE EL TRONO
De nuevo se me permitió estar ante el trono de Dios y presenciar una escena asombrosa y emocionante. Pude oír el sonido de trompetas según estaba yo delante del trono de Dios. Me faltan palabras para describir adecuadamente la emoción y sobrecogimiento que sentí.
Habían doce ángeles ante el trono, vestidos con ropajes cuya apariencia sobrepasa cualquier descripción fidedigna. Lo mejor que les puedo decir es que en los pectorales de su vestimenta tenían incrustadas piedras preciosas. Sobre su cabeza tenían algún tipo de tela celestial de colores magníficos. El borde de sus túnicas largas era de oro.
El estruendo de trompetas anunciaba a los santos según venían, uno a uno, a presentarse ante Dios. Una cantidad incalculable de santos, ángeles y seres celestiales llenaba una enorme galería. Todos glorificaban a Dios.
LOS REDIMIDOS
Los redimidos de todas las edades eran magníficos y hermosos. No eran soplos de humo o nubes que flotan en el espacio sino personas reales.
Por todas partes que miraba, veía a los ángeles de Dios que alababan continuamente su majestad.
Estando delante del trono oí una gran voz decir:
(Apocalipsis 21:3)
Y oí una gran voz del cielo que decía: "He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su Dios.
Entonces ví una nube de gloria llena de relámpagos, truenos y voces. Según miraba, ví que la mano de Dios salía de la nube y que comenzaba a enjugar las lá grimas de los ojos de los santos. La Palabra dice que “Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos” (Apo calipsis 21:4).
Oí a Dios decir:
(Apocalipsis 21:4-5)
4 Enjuagará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor;porque las primeras cosas pasaron. Y el que estaba sentado en el trono dijo: He aquí, yo hago nuevas todas las cosas. Yme dijo: Escribe; porque estas palabras son fieles y verdaderas.
Dios les dijo a los santos reunidos: “Veo que sus nombres están escritos en el libro de la Vida del Cordero. Bienvenidos al gozo del Señor.”
Una vez más, otro pasaje bíblico vino a mi mente:
(Mateo 25:2 1)21 Y su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor.
Tras eso el Señor puso coronas espléndidas de oro en la cabeza de todos sus santificados.
Supe que las bendiciones de Dios continuarían fluyendo para todos los redimidos. ¡Supe que no terminarían jamás!

martes, 1 de julio de 2008

Chats y blogs, nuevos espacios para la agresión

La tecnología se suma al fenómeno del acoso y maltrato entre personas . Advierten sobre los síntomas que revelan el "cyberbullying"(acoso y agresión en los chat blog y webs) .no hay derecho en volver centros de violencia lo sitios donde nos relajamos y que antes eran sitios de entretenimiento

Si algo que no te gusta y muestras tu desagrado tienes que expresarlo sin agredir y si te repoden con una agresión es mejor salir temporalmente de la sala del chat y no entablar un habiente hostil y generador de violencia

en nuestro país es muy común resolver las cosas por la vía de la agresión eso lo demuestran las estadísticas y de eso no se escapan las salas de chat focos de agresión y desahogo de problemas internos donde se ve como potencial enemigo alguien que no comparta su concepto y se lanzan improperios y amenazas fuertes causando sentimientos de rabia dolor y tristeza que en casos aislados se concretan de lo virtual a lo real como pasa en los chat de barón rojo y otras barras salvajes del futbol colombiano ,cosas heredadas de otros países como una herencia maldita. pero como salir de esta problemática que cada día se ve creciendo como un foco de violencia, que aporta un grano mas de la arena de la intolerancia ; sin duda es algo difícil de lograr
porque aumenta mas y mas la censura y el vaneó en casi todas las web y blog ; se hace hasta imposible completar una frase que empiece con silabas de groserías u ofensas conocidas ,se te trunca la palabra y terminas enloquecido, pero son causas secundarias de toda esta violencia que te hacen quedarte alejado de las salas masivas de chat o simplemente por miedo al escarnio ni opinas. el punto clave es volvernos respetuosos; además poner en claro tu opinión sin forzar a alguien a que piense como tu y sobre todo saber cuando te debes salir si vez que la cosas se ponen feas ; no caer en la polémica agresiva, acuérdate que entras a relajarte y hacer ciber amigos no a un juego de estrategia donde tu aniquilas a tus adversarios y si con esto no te basta trata de entender hay gente con muchos problemas y pocos amigos ,que no encuentran otro camino que andar agrediendo sin temor ni respeto hacia nadie ni hacia DIOS …amaras al prójimo como a ti mismo, es el mandamiento menos aplicado en un sala de chat y en la vida misma…no mas violencia verbal en
los chat

…profevelez





viernes, 27 de junio de 2008

DANDO GRACIAS A DIOS POR TODO





Vladimir Marín multado por exhibir inscripción religiosa

El futbolista colombiano del tricampéon paraguayo Libertad deberá pagar una multa de unos 123 dólares por haber exhibido una inscripción religiosa durante el festejo de su gol.

"La semana pasada me llamaron a declarar, pero nada sabía de la multa que me aplicaron. Es la primera vez que me sucede esto, pues si muestro la banderita es solo en señal de agradecimiento a Dios y no para ofender", afirmó Marín al diario "Popular".

Según el Tribunal de Justicia de la Asociación Paraguaya de Fútbol, Marín fue castigado con diez jornales mínimos, equivalente a unos 123 dólares, "por la conducta antirreglamentaria al exhibir un cartel durante un encuentro de fútbol".

El pasado 8 de junio, Martín, quien se declara seguidor de la Iglesia Carismática Internacional, festejó su gol ante el Sportivo Luqueño exhibiendo un cartel con la inscripción "Jesús es mi salvador. Buscalo!!!".

El futbolista se declaró extrañado por la sanción e indicó que lo ha hecho en otros países y que nunca tuvo problemas disciplinarios porque lo hacía "sólo para dar gracias a Dios por los logros obtenidos en mi carrera deportiva".

Asunción
EFE....¿¿¿SI ES MUCHO MEJOR TENER PUBLICIDAD DE CERVEZA Y DE CIGARRILLOS EN UN TORNEO TODO EL AÑO E INCITAR AL ALCOHOLISMO Y DROGADICION ACABANDO MILES DE HOGARES QUE DARLE LA GLORIA DIOS POR UN TRIUNFO ?????¡¡¡¡¡¡¡ MENTECATOS QUE LE LLAMAN MALO A LO BUENO ¡¡¡¡¡

jueves, 12 de junio de 2008

LA NASA descubre bichos del infierno



Geoquímicos y microbiólogos están hurgando en los detalles de la bioquímica extrema de las profundidades de la Tierra, donde los procesos químicos y metabólicos van a ritmo glacial, y la vida parece estar totalmente desconectada de los ciclos biológicos basados en fotosíntesis que dominan la vida en superficie.

Profundo, muy profundo, debajo de la superficie de la Tierra, una comunidad microbiana se alimenta y prospera. Despacio, pero tenazmente, estos habitantes de las profundidades se alimentan de gases que se filtran en las fisuras rocosas y se dividen – quizás una vez cada mil años – para hacerse más numerosos. Geoquímicos y microbiólogos están hurgando en los detalles de la bioquímica extrema de las profundidades de la Tierra, donde los procesos químicos y metabólicos van a ritmo glacial, y la vida parece estar totalmente desconectada de los ciclos biológicos basados en fotosíntesis que dominan la vida en superficie.

“Hay una enorme biomasa dentro de la Tierra”, dice David Boone, microbiólogo en la Universidad Estatal de Portland en Oregón, quien ha aislado de un pozo de Virginia una especie de Bacillus que nombró infernus, o “del infierno”. B. infernus vive a casi tres kilómetros de profundidad. Boone esta pensando en establecer una estrecha colaboración con el programa ya en marcha de Tullis Onstott, financiado por la NASA y el NSF, que intenta desenmascarar los detalles de la vida microbiana en las rocas extraídas de las profundidades de unas minas de oro sudafricanas.
“Hemos estado examinado el límite de la vida” dice Onstott. Hoy, los geoquímicos, están intentando dilucidar como una criatura puede “mantener la integridad encarando las privaciones y los males del ambiente salino y de alta temperatura” millas por debajo de donde la mayoría de las especies, con las que estamos familiarizados, subsisten. La presión a esas profundidades es tres veces la de la superficie, y las temperaturas suben hasta los 60 ºC (140 ºF). Las fracturas contienen agua y gases como metano, amonio, e hidrógeno molecular, así como los organismos que o bien se alimentan de, o contribuyen a dicho contenido de gases.

Boone, que ha estudiado una de las primeras muestras con una bacteria reductora de hierro arrancada de las minas de Sudáfrica, dice: “extraemos estos organismos literalmente de una roca sólida. Hemos puesto especial cuidado para demostrarnos a nosotros y a cualquiera, que lo que estamos viendo son realmente organismos de la profunda subsuperficie”.

Las muestras se recogen a bolsas estériles, y los científicos luego las pelan para eliminar cualquier posible contaminación. Asimismo, los investigadores analizan posibles contaminaciones buscando restos de fluidos de los que se usan en las perforaciones. Estos fluidos se difunden en las rocas mas deprisa de lo que los microbios pueden, y los análisis demuestran que estos fluidos no están presentes en las muestras.

Boone dice, “si los solutos no pueden difundirse dentro de las rocas, los organismos tampoco pueden”.

Otro sondeo de contaminación se realiza utilizando microsferas de látex que tienen las mismas propiedades adhesivas en superficie que las bacterias. Los científicos revisten algunas muestras con estas microsferas según las recogen y una vez en el laboratorio las someten al proceso de limpiado completo. Boone dice que no queda ninguna microsfera en dichas muestras cuando se procesan para evaluar la contaminación.

Onstott encontró su primer microbio de las profundidades en 1996 cuando un estudiante graduado, David Phillips, que trabajaba al tiempo para una compañía minera dedicada al oro, arregló una visita a una mina en Sudáfrica. Aproximadamente al mismo tiempo, un equipo del Laboratorio Nacional Pacific Northwest en la Universidad de Washington describían en la revista Science que unos microbios podían vivir del hidrógeno desprendido de las reacciones entre agua y minerales en el basalto de la cuenca del río Columbia.

El descubrimiento de vida profunda dentro de la Tierra “agranda enormemente nuestra biosfera”, tal como dice Michael Meyer, investigador titular en astrobiología en el Cuartel General de la NASA en Washington D.C.:”Duplica nuestra biomasa, y amplia los lugares en los que podría haber organismos en nuestro sistema solar”.
Donde el Sol nunca brilla

John Parkes, un geomicrobiólogo de la Universidad de Bristol, Reino Unido, dice que la evidencia de esta, tan grande, biomasa subterránea, tan distante de la fuente de energía usual, indica “que debe haber otra energía disponible, o caminos más eficaces de usar la preservada como carbón fotosintético en los sedimentos”. Según Parkes, un uso más eficiente de la materia orgánica puede ser posible según los sedimentos son llevados más profundos en la Tierra, “puesto que las altas temperaturas activan la recalcitrante materia orgánica que contienen haciéndola degradable para las bacterias”.

Sin embargo, quizás la parte más fascinante acerca de estos ecosistemas de rocas profundas es que algunos pueden existir completamente aparte del ciclo fotosintético. Durante miles de millones de años, toda la vida superficial en la Tierra ha adquirido la materia orgánica directa o indirectamente de la fotosíntesis. Incluso, tal como dicen los investigadores del Laboratorio Nacional Pacífico, los organismos que viven en los respiraderos submarinos dependen finalmente del oxígeno expelido por la vida superficial fotosintética y del hidrógeno producido por la fermentación de la materia orgánica producida fotosintéticamente.

Hasta ahora, no queda perfectamente claro si puede haber trazas o no de compuestos orgánicos en las rocas de la cuenca del río Columbia y las de las minas de oro Sudafricanas. Parece que, sin embargo, estos microorganismos de las rocas de las profundidades producen materia orgánica usando sólo la química inorgánica disponible en la propias rocas: hidrógeno, liberado cuando los minerales de la roca reacciona con el agua, y dióxido de carbono. Los científicos especulan que este podría ser el modelo de la biología original de la Tierra, antes de que la fotosíntesis evolucionara. Quizás podría ser también un modelo de vida en otros mundos.
La posibilidad de que la vida profunda en la Tierra pueda alimentarse sin recurrir a la energía solar, dice Meyer, significa que no es disparatado que se pudiera encontrar vida bajo la superficie de Marte o Europa, o incluso dentro de los cometas. “Si se tienen alimentos energéticos disponibles en las profundidades, sin ninguna comunicación con la superficie, esto incrementa enormemente las posibilidades de que si la vida una vez se inició en Marte, o fue transportada hasta allí, podría estar todavía presente en las profundidades hoy en día”.

El trabajo va a continuar en la mina de oro en Sudáfrica, con creciente participación de investigadores sudafricanos y europeos, con objeto de dilucidar la historia evolutiva de la vida bajo la superficie. Onstott está buscando evidencias adicionales de que al menos algunas bacterias pueden existir sólo en el hidrógeno producido en la roca, aparte de cualquier posible sustancia orgánica.

También quiere mirar si de hecho los microbios viven dentro de la estructura mineral de la roca sólida – la porosidad es mínima, un mero uno por ciento – o residen solo en las fracturas que surcan las formaciones rocosas. El intenta hacer un perfil de núcleos extraídos de la roca y enfrentarlo al de zonas fracturadas rellenas de fluidos “y ver hasta que punto hay un cambio en la cantidad de biomasa que puede ser atrapada dentro de la roca” a medida que uno mira más profundamente dentro de la roca sólida, lejos de la fracturada superficie.

Hasta aquí, dice Onstott, la evidencia de microbios dentro de la roca es vaga, pues la cantidad registrada esta en el límite inferior de detección de las técnicas de medida.

Se empezarán investigaciones de campo en nuevos lugares, incluyendo una formación rocosa de dos mil millones de años y de varios kilómetros de grosor, el complejo Bushveld. Según Onstott, el tipo de roca del complejo Bushvelt, conocido como roca “mafic”, nos proporciona una oportunidad para mirar una interacción agua-roca en una roca de composición química diferente de las de granito de las minas de oro.

A diferencia de la cuenca del río columbia y de las minas de oro en Sudáfrica, en el complejo Bushvelt no hay posibilidad de restos sedimentarios que pudieran contener compuestos orgánicos generados por fotosíntesis, dice Onstott. “Podemos acceder allí a agua prístina,” a través de unas minas de platino existentes, “por lo que seremos capaces de observar si el hidrógeno esta siendo generado y si ese hidrógeno está siendo utilizado” para crear ácidos grasos orgánicos.(http://nai.arc.nasa.gov/news_stories/news_print.cfm?ID=46 )“Geoquímicamente, el complejo Bushvelt es más análogo a lo que podemos esperar encontrar bajo la superficie de Marte”.

lunes, 9 de junio de 2008

7 JOVENES EN EL INFIERNO 2da PARTE

dice:"Pero los cobárdes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechizeros, los idólatras y todos los mentirosos, tendrán su parte en el lago de fuego que arde con fuego y azufre que es la muerte segunda".

En el momento que Rogelio leyo este versículo Rogelio murió y llegó al infierno, este hombre hacía un mes que estaba en este lugar, aún tenía carne en su rostro, pero igualmente sufría como muchos de los que están ahí, este hombre de pronto no sabía el porqué estaba allí, pero yo creo que fué la única y la última oportunidad, que este hombre tuvo para aceptar al Señor, asi como muchos han tenido la oportunidad de aceptarlo. En este día te invito a que abras tu corazón a Jesús, que Él es el camino la verdad y la vida, y que por medio de Él solamente podemos ir al Reino de los Cielos, y que el Señor Jesús también nos pide que sigamos su camino en santidad y honor.

Que el Señor te bendiga.

(Cuarto testimonio)

Dios les bendiga hermanos, en el momento en el que el Señor me tomó de su mano, pude ver que estaba parada sobre una roca, mire atrás y vi que había un ángel tras nosotros, y comenzamos a descender en ese túnel oscuro a una velocidad indescriptible y en un trampo del camino yo voltié a mirar y vi que ese ángel ya no estaba, me llené de mucho más temor y miré al Señor y le dije: "Señor donde está en ángel?, por que no viene tras nosotros?" y Él me dijo: "Es que el no puede entrar a donde tú y yo vamos". Continuamos descendiendo y nos detuvimos en un lugar como cuando se detiene un acensor y se abrieron varios túneles y tomamos por aquél del que les hablaba mi hermana Sandra, en donde la gente estaba tomada de grilletes en sus manos, en donde estaban colgados de sus cráneos y vi que era una pared interminable, había millones y millones de personas que tenían gusanos que caminaban por todo su cuerpo, pero vi enfrente y vi que había una pared exactamente igual, yo dije: "Señor!, tantas personas en este lugar!" Y vino a mi mente una palabra que para entonces no conocía, y el Señor me dijo: "Es que el Seol, es insaciable, el infierno es insaciable". Y salimos del túnel y llegamos a aquél lugar al que llamamos "Valle da Pailas (calderos)". Estas pailas estaban rebosando de un lodo que hervía y comenzamos a acercarnos a una de ellas, y a la primera persona que pude ver de cerca fué a una mujer. El Señor fijó su mirada en ella, mientras que ella subía y bajaba en ese lodo que hervía, pero cuando Él fijó su mirada ella se quedo suspendida como hasta la cintura, y el Señor la miró y le dijo: "Mujer, como te llamas?". Y ella le dijo: "Me llamo Rubiela". Yo veía que esta mujer tenía su cabello lleno totalmente de aquél lodo que hervía, carne colgaba de sus huesos ya enegrecidos por el fuego, entraban gusanos por las cuencas de sus ojos, salían por su boca, entraban por su nariz, salían de sus oídos y por donde no podían entrar, sencillamente abrían un hueco, le causaban tal dolor!, esta mujer miraba desesperadamente al Señor y le decía:"Jesús, ten misericordia de mí! Sácame de este lugar!, ten misericordia de mí!, yo ya no puedo más!, que pare ya Señor, yo ya no puedo más!,ten misericordia de mí!". El Señor le pregunto a esta mujer por que estaba ahí. Ella le dijo: "Señor, estoy aquí por vanidad". Y eso mismo era lo que decía aquella placa que tenía incrustada en su pecho, ella decía que tenía en su mano un frasco, yo miraba un tarro común y corriente, ella veía un perfume lujoso, y ella tenía que tomarlo y aplicar ese ácido que hervía, en todo su cuerpo, y el momento en que lo hacía toda su carne se derretía y gritaba desesperadamente y decía: "Jesús! ya no puedo más!, ten misericordia de mí!, sácame de aquí aunque sea un segundo!, ten misericordia de mí!".

Yo no estoy diciendo que es pecado aplicarse un perfume. El Señor nos dijo que esta mujer estaba ahí por su perfume, la palabra de Dios nos dice en Deuteronomio 5:7 "No tendrás Dioses ajenos delante de mí, dice El Señor", esta mujer estaba allí por que puso en primer lugar su vanidad. Por que el primer lugar en su vida eran sus perfumes, su arreglo personal, pero Jesús es Rey de Reyes y Señor de Señores, Él debe ser el primero, el segundo , el tercero en tu vida, por eso, es que esta mujer estaba allí, por haber puesto en primer lugar su vanidad.

El Señor la miró con tristeza y le dijo:"Rubiela, es tarde para tí, gusanos serán tu cama y gusanos te cubrirán". En esos momentos de levantó una cobija de fuego que la cubrió totalmente, mientras que se consumía en aquella paila , gimiendo desesperadamente de dolor.

Nos fuimos alejando de aquél lugar y comenzamos a acercarnos a unas puertas gigantezcas, que a medida que nos acercábamos se fueron abriendo, en el momento que estuvimos adentro, pudimos ver que era una caverna gigantezca y vimos hacia lo alto, luces de colores que se movían, vimos como una cámara de humo y de repente como que empezamos a escuchar música: salsa, ballenato, rock y toda esta música que se escucha secularmente en las emisoras. De repente, el Señor que es todo poderoso, hizo un movimiento de su mano y vimos millones y millones de personas que estaban colgadas con grilletes en sus manos, que estaban brincando desenfrenadamente sobre el fuego, y el Señor nos mira y nos dice: "Miren, esta es la paga para los bailadores". Ellos tenían que brincar sin poder detenerse un segundo. Si sonaba salsa , tenían que brincar al son de la salsa, si sonaba rock tenían que brincar al son del rock. Pero lo peor de todo no era eso, no era que no podían detenerse, lo peor de todo era que sus zapatos no eran normales, tenían unos clavos de aproximadamente 15 centímetros de largo, que estaban atravesados hacia arriba, y tenían que brincar y brincar sin poder detenerse un segundo, aquellos que querían detenerse venían demonios con lanzas y se las enterraban y les maldecían y les decían: "Alábalo por que este es tu reino, alabalo, alábalo, no puedes detenerte, tienes que alabarlo, tienes que brincar, tienes que bailar, no puedes detenerte un segundo". Lo peor de todo en este lugar, sabes que es?, es que la mayoría de las personas que estaban ahí en este lugar, habían sido cristianos que habían muerto en una discoteca, muchas personas se preguntan y dicen: "Pero donde dice la Biblia que es malo bailar?". En Santiago 4:4 nos dice la palabra: "Oh! Almas adúlteras no sabéis que la amistad con el mundo es enemistad contra Dios?, cualquiera pues que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios". Y 1 era de Juan capitulo 2 versículos del 15 al 17 nos dice:"No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo, si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en Él, por que todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida no provienen del Padre sino del mundo, y el mundo pasa y sus deseos, pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre". Recuerda que el mundo pasa, esto se acaba, pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre, y amigo hermano, al salir de este lugar vimos unas como pasarelas, que eran las que dividían el infierno como en secciones de sufrimiento, luego vimos sobre ellas a un espíritu, en la misma forma de un muñeco que hemos visto sobre la tierra, aquí es llamado duende, troll o gnomo. Tiene el pelo de colores, tiene cara de viejo y cuerpo de niño, no tiene sexo y además sus ojos destellan maldad.Y el Señor nos mostraba que este espíritu es un espíritu de lascivia, y el tenía una lanza en sus manos y modelaba sobre aquella pasarela como cualquier reina, como cualquier modelo, y a su paso enterraba la lanza en aquellas personas que se hallaban abajo de el, y les maldecía y les decía: "Acuérdate el dia que pasaste por una iglesia cristiana y no quisiste entrar, acuerdate del día que te predicaron y no quisiste escuchar, acuerdate del día que te entregaron un tratado y tu lo tiraste". Y ellos trataban de taparse lo que les quedaba de oidos y le decían: "Cállate!, cállate! no me digas más!, no quiero saber más!, cállate!". Pero ellos se gozaban, ellos se deleitaban en su dolor.

Continuamos caminando con el Señor, y mientras la gente gritaba y gemía pidiendo misericordia, escuchamos aun hombre que clamaba aún más fuerte que todos los que se hallaban ahí, y este hombre comenzó a clamar diciendo: "Padre!, Padre ten misericordia de mí!". El Señor no iba a detenerse con este hombre, pero cuando le llamo Padre, Él se estremeció y lo volteó a mirar y le dijo: "Padre?, tú me llamas Padre?, no!, yo no soy tu Padre, ni tú eres mi hijo, por que si fueras mi hijo estarías conmigo en el Reino de los Cielos, vosotros sois hijos de vuestro padre el diablo". En ese momento se levantó una cobija de fuego y lo cubrió totalmente.

Y el Señor nos contaba la historia de este hombre, y nos decía que el le llamaba Padre por que él le había conocido, que era un hombre que había asistido a la iglesia, al cual le había hablado por su palabra, al que le había dado mil promesas.Y nosotros le dijimos: "Señor pero entonces que pasaba!?". El Señor nos dijo: "Es que el, vivía una vida doble, era uno en su casa y otro en la iglesia, el decía bueno, pues como aqui cerca no vive ni el pastor, ni ningún hermano, yo puedo hacer lo que quiera".

Pero se le olvido que los ojos de Dios estan puestos sobre nuestros caminos, y que nadie puede burlar al Señor.La palabra de Dios nos dice: "No os engañéis , Dios no puede ser burlado, pues todo lo que el hombre sembrare eso mismo segará".

Este hombre estaba sufriendo mil veces más que cualquier persona en el infierno, estaba pagando una doble condenación, la condenación por su pecado, y la condenación por haber creído que al Señor se le podá burlar.

El pueblo hoy en día se ha acostumbrado a jerarquizar el pecado, acostumbramos a decir, que es más pecador, el ladrón y el violador, el homosexual, que el mentiroso y que el chismoso, pero ante los ojos de Dios, estos pecados pesan lo mismo.Y la Biblia nos dice, la palabra de Dios nos dice que la paga del pecado es muerte, que el alma que pecare, esa morirá.

Amigo hermano, yo te invito hoy que Jesús está extendiendo su mano, está extendiendo su misericordia en tu vida, tu te arrepientas, la palabra de Dios nos dice que el que se arrepiente y que se aparta de su pecado alcanzará misericordia. Y es mejor creer ahora, que esperar para comprobar después.

Dios te bendiga.

(Quinto testimonio)

La palabra de Dios dice en el libro de Romanos 6:23 "Por que la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, Señor nuestro".

Cuando descendimos a aquél lugar comencé a experimentar el dolor y el sufrimiento de lo que es la muerte, y estaba muy asustado por lo que estaba viendo. Comencé a darme cuenta que había muchas personas ahí, y cada uno gritaba y gemía. Veíamos como hacia lo lejos se veían unas tinieblas. Pero el Señor con su presencia, comenzó a discipar estas tinieblas en aquél lugar, cuando seguimos caminando y escuchabamos los gritos y lamentos de miles y miles de personas que gritaban al unísono y pedían que el Señor los sacáse de aquél lugar, en ese momento comenzamos a darnos cuenta de que había muchas personas ahí, comenzamos a sentir un gran dolor por que veíamos que el Señor también sufría cada vez que veía a estas personas. Muchos les gritaban y le decían: "Señor!, permítenos salir aunque sea un segundo, un instánte de este lugar!, permíteme salir!". Muchas veces el Señor les decía y les preguntaba: "Pero para que quieres salir de este lugar?" y ellos decían: "Por que quiero ser salvo!, por que quiero arrepentirme y ser salvo!". Pero ya era tarde para ellos, y querido hermano que me escuchas, recuerda algo, la oportunidad es para ti y para mi, ahora es cuando nosotros debemos decidir para dónde queremos ir, a un lugar eterno de salvación o a un lugar eterno de condenación.

Comenzamos a caminar y me di cuenta como se hacía un piso debajo de nuestros pies y cuando ya pasabamos este piso se caía, y un fango que hervia y hervía y un fuego que salía de ese fango y un olor que despedía muy profundo que empezaba a trastornar nuestro cuerpo, nos causaba náuseas el sentir este olor, y el grito de muchas personas, de muchos lamentos de muchas personas,hacia a lo lejos comence a darme cuenta como un hombre se suspendia estaba a la altura de su cintura y cuando sacaba sus manos como se caía la piel de sus huesos y dentro de él, se veía un humo gris, y mis compañeros y yo le preguntamos qué es ese humo gris? que se ve dentro del cuerpo de ellos. Y el Señor nos decía: "Ese humo gris es su alma, que ha quedado atrapada en un cuerpo de pecado". Como lo dice Apocalipsis 14:11 "Que el humo de sus tormentos sube por los siglos de los siglos y no tienen reposo ni de día ni de noche".

En aquél lugar comenzamos a darnos cuenta de muchas cosas que habíamos ignorado durante mucho tiempo de aquí de la tierra. Que aquí es donde sabemos a dónde vamos a ir, a un lugar eterno de salvación o de condenación. Seguimos caminando tomados de la mano del Señor y nos dimos cuenta que el infierno está dividido en diferentes secciones de sufrimientos. Y fuimos a un lugar en donde había muchas mazmorras.Y veiamos a unas almas que estaban en ese lugar atormentadas por unas clases de demonios, y estos demonios atormentaban a estas personas y ahi se burlaban de ellas y le decían: "Maldito ahora si alaba a satanás, alábalo, ahora si, sírvele como le servías en la tierra". Y ellos sufrian por que aún el castigo, los gusanos, el fuego que los consumía, un ácido que les consumía toda su piel, allí los atormentaba.

Comenzamos a ver en una de estas mazmorras a dos jóvenes, dos jóvenes que estaban allí y tenían en sus manos unas dagas y comenzaban a puñalearse y el uno al otro se decían palabras, y se maltrataban y se injuriaban de una forma, y se decían : "Maldito! por tu culpa yo estoy en este lugar!, por que tu hiciste que yo llegase a este lugar de tormento!, por que tu cegaste mi vida! y no me permitiste conocer al Señor!, no me permitiste recibirlo, por que muchas veces cuando tuve la oportunidad, tu me decías que no, y por eso ahora yo estoy en este lugar de tormento!, atormentado de día y de noche". En ese momento comenzamos a ver una visión de la revelación que el Señor nos estaba dando y comenzamos a ver a estos dos jóvenes como un día estaban divirtiéndose en una taberna, y en un momento que tuvieron de embriaguez comenzaron a discutir y tenían una disputa, una contienda ahí entre ellos, uno saco una botella y el otro sacó una navaja, y comenzaron a pelear en ese momento y comenzaron a luchar, cuando en ese momento comenzaron a puñalearse el uno al otro hasta que acabaron con sus vidas, y esa misma escena que vivieron allí en la tierra la tenían que estar repitiendo allí en aquél lugar, y lo terrible que aún venía un recuerdo a ellos que aquí en la tierra ellos se conocían y se estimaban como dos amigos, como dos personas que se habían conocido desde muy niños y se habían estimado como hermanos. Pero déjame decirte amigo y hermano, que amigo solo hay uno y se llama Jesús de Nazaret, ese amigo verdadero, ese amigo fiel, que realmente esta en todos los momentos, caminamos con el Señor y comenzamos a darnos cuenta, allí en aquellas mazmorras a una mujer que estba allí revolcandose en un fango, su cabello todo desordenado, y veíamos como allí en aquél fango en esa mazmorra veiamos como una serpiente se enrollaba en su cuerpo y comenzaba a introducirse por sus partes bajas y tenían una relación. Allí las personas, los hombres y las mujeres que sienten en la fornicación, que viven la fornicación aquí en la tierra, también en el infierno lo van a vivir, pero allí van a hacerlo con serpientes, y esas serpientes tenían unos punzones como de unos 15 centímetros de largo y entraba por su cuerpo y comenzaba a destruir todo su cuerpo, comenzaba a destruir todo su cuerpo en ese momento, y comenzabamos a escuchar como ella gritaba y gemía de dolor, le decía al Señor: "Señor que pare ya! , no quiero mas este sufrimiento!, no quiero más este sufrimiento que pare ya! por favor!!". Y veíamos como esa serpiente se introducía y destruía todo su cuerpo, y gritaba y se lamentaba: "Ya no lo vuelvo a hacer!, ya no quiero mas! que pare! que pare por favor!, ya! no quiero mas!". En ese momento nosotros tapamos aún nuestros oídos, pero no podíamos dejar de oir lo que ella decía y gritaba, y tapabamos aún más nuestros oídos y no queríamos seguir escuchando ni viendo y le decíamos al Señor: "Señor ya no mas!". Pero el Señor nos decía: "Es necesario que veas para que cuentes a mi pueblo, por que mi pueblo, por que mi pueblo esta siendo destruido, por que mi pueblo esta ignorando la verdadera salvación, el verdadero camino hacia la salvación".

Seguimos caminando y hacia lo lejos comenzamos a ver un valle gigantezco, un mar inmenso, un lago gigantezco allí, pero de dolor, de sufrimiento, de una lava que hervía con hervor de fuego como dice la Palabra de Dios, y como allí miles y miles de personas que sacaban sus manos, y aún había muchos demonios que sobrevolaban este lago y los hundían con unas lanzas en forma de "S", y les decían y se burlaban de ellos y les decían: "Maldito, ahora si!, alaba a satanás, ahora si! alábalo!, ahora si sírvele! como le servías en la tierra". Y podíamos ver muchas personas allí y veíamos muchas escenas de personas allí, pero aún asi nosotros nos sentíamos atemorizados, nos tomabamos de las manos, por que nosotros sentíamos que si nos soltabamos de la mano del Señor nos podíamos quedar en aquél lugar, nosotros estabamos asustados y atermorizados por lo que estabamos sintiéndo en ese momento, y vimos hacia lo lejos a un hombre que estaba suspendido en la mitad de aquél lago, y a este hombre se le veía en su rostro un dolor, además del sufrimiento que sentía, había dos demonios que sobrevolaban su cuerpo allí, y estos dos demonios tomaban y punzaban su cuerpo y llegaban y le sumergían las lanzas y sacaban sus costillas, y estos dos demonios se burlaban de él y reían, y él sentia, y el Señor nos mostraba a ese hombre con ese sufrimiento que sentía, pero dentro de él había un sufrimiento como el del rico de la historia, allí el también estaba atormentado por el recuerdo de que su familia podía llegar también a aquél lugar de tormento, que su familia podía estar allí también, y que tuvo la oportunidad de haberles hablado pero que nunca se preocupó por darles un mensaje de salvación para que no llegaran a este lugar de tormento, allí el se recordaba que había habido una oportunidad para todos ellos, y que él había sido una persona importante para llevar este mensaje pero ignoró esto, y estaba preocupado por sus hijos y por su esposa, aquí en aquel lugar, eso lo atormentaba, y aún estos demonios venían y le amputaban sus brazos y el caía en este fango, caía en este fango que hervía con fuego de azufre, que hervía y el se revolcaba del dolor por que este fango le quemaba toda su carne, comenzaba a desprenderse su carne y se consumía en este fango y comenzaba a quedar un cuerpo calavérico, y el comenzaba a salir , y comenzaba a retorcerse como una serpiente para poder salir de allí, y venían los demonios y lo hundían y lo metían más hacia este fango allí en aquél lugar.

Después de esto comenzamos a ver hacia lo lejos una serie de demonios que estaban alli, y vi algo que me cautivaba y me di cuenta que uno de estos demonios estaba sin un ala y le preguntamos al Señor: "Señor, por que a este demonio le falta un ala?". El Señor nos decía: "este demonio fué lanzado para un propósito aquí en la tierra, pero este demonio no cumplió su cometido y así fué lanzado nuevamente al infierno por un siervo de Dios y satanás vino y lo castigó y fué quitada y amputada esa ala". En ese momento entendimos y comprendimos que nosotros tenemos poder y autoridad para hechar fuera demonios para hechar fuera toda potestad, todo principado. Querido amigo que me escuchas, este testimonio no es para condenación sino para salvación, para que te des cuenta en que condición tu estas delante de Dios para salvación y no para condenación, querido amigo por favor en este momento, coloca tu corazón delante de Dios y presenta tus pecados, para que si llegáse a venir en este momento el Señor, tu te fueras con Él, y no te fueras a este lugar de tormento, por que allí es el lloro y el crujir de dientes, allí es cuando vamos a entender verdaderamente por qué Dios pagó un precio en la Cruz del Calvario. Allí habían muchas personas condenadas y aún ignorando que ellos habían sido condenados por una serie de pecados que ellos creían que no era pecado. Querido amigo, examínate!, exaínate!, no crea que la mentira, el robo, la vanidad, todo esto es pecado delante de Dios, arrepiéntete hermano!, querido amigo que me escuchas, yo te doy este mensaje para que te arrepientas y busques aún más al Señor.

(Sexto testimonio)

Salmos 62:12 dice: "Y tuya oh Señor es la misericordia por que tu pagas a cada uno conforme a su obra".

En aquella mañana cuando el Señor nos visitó en el cuarto donde nos encontrábamos y me tomó de la mano y comenzamos a descender con mis hermanos, mi vida estaba completamente llena de temor, sentía algo que no puedo describir, solamente sabía que no podía soltarme de la mano de mi Salvador, que Él era mi vida y mi luz, que mi esperanza estaba únicamente en Él, por que si no era así yo podía quedarme en aquél lugar. Jamás pensé ir a aquél lugar, a conocer el infierno, además por que no creía que existiera, siempre pensé, aún siendo cristiana equivocadamente que podía ir a un purgatorio, sin embargo Dios mostró a mi vida esta realidad, en aquél momento cuando llegamos al infierno, sólo sé que este lugar tembló y que todos los demonios salieron a esconderse por que no había ninguno que pudiera resisitr la presencia de Jesús.

Escuchamos por un momento que todas las almas aumentaron su clamor por que todas conocían que en ese día estaba Jesús de Nazaret, todos sabían que el era el único que podría tal vez sacarlos de ese lugar, tenían esa esperanza, aunque realmente no fuera cierta.

Y fué así como comenzamos a caminar de la mano de Jesús, y llegamos a la sección de los fornicarios. Allí Jesús fijó su mirada sobre una mujer, esta mujer estaba totalmente sumergida en el fuego, pero cuando Jesús le miró comenzó a salir del fuego, aunque su sufrimiento no paraba; nosotros comenzamos a ver a aquella mujer completamente desnuda, podíamos ver cada una de sus características físicas, su cuerpo estaba completamente sucio y maloliente, su cabello estaba alborotado, despeinado, y tenía como una lava amarillenta verdosa encima, ya no tenía ojos, sin embargo a través de las cuencas de sus ojos podía vernos, y ya sus labios se caían a pedazos mientras estaba allí, gimiendo y gritando del dolor, ya no tenía orejas, sino solamente su orificio, podíamos ver como con sus manos enegrecidas y huesudas trataba de componer la carne que caía de su rostro tomandola del fuego y poniendola una vez más en su cara, pero esto le producía mayor dolor aún, entonces ella se estremecía aun más y gritaba aún más, sus lamentos parecía que comenzaban pero que no tenían fin, podíamos ver su cuerpo lleno de gusanos también y una serpiente enrollada en su brazo, muy grande, demasiado ancha que tenía punzones alrededor, esta mujer tenía taladrado el 666 el número de la bestia del cual nos habla la palabra en Apocalipsis, tenía una placa en un material muy extraño, no lo conocíamos, no lo podíamos distinguir, sin embargo veíamos que este material no se consumía con el fuego y que esta placa no se movía por ningun motivo sino que permanecía fija en su pecho, esta placa estaba escrita en un idioma extraño, pero nosotros podíamos entender en ese momento lo que decía en ella, en esa placa, decia: "Estoy aquí por fornicaria". Cuando Jesús la vió le dijo: "Helena tú por qué estás aquí en este lugar?". Elena mientras hablaba con Jesús se retorcía, se retorcía y gritaba a causa del dolor que le producía su castigo. Y le dijo Helena: "Señor estoy aqui por fornicaria". Y comenzó a pedirle perdón a Jesús una y otra vez. Sin embargo en un momento comenzamos a ver la historia de su muerte; Helena se encontraba teniendo una relación sexual con uno de sus amantes, por que creyó que el compañero con el que ella vivía había salido de viaje, pero el volvió a su casa, la encontró con su amante, entonces se fué hacia la cocina y tomó un gran puñal enterrándoselo en la espalda de esta forma Helena murió y fué conducida hacia el infierno de la misma forma como habia muerto desnuda, así mismo se veía en el infierno.

En el infierno todas las cosas se materializan, y podíamos ver aún presente ese puñal clavado en su espalda, que le producía un gran dolor ahí a Helena, para ese entonces ella llevaba 7 años en este lugar, recordaba uno a uno de los instantes de su vida, recordaba cada momento de su muerte, recordaba también que un día tal vez le habían predicado a ese Jesús que ahora tenía en frente suyo, y que era el único que podía salvarla, pero ya era tarde para ella asi como para todos los que estaban ahí en el infierno. La palabra de Dios, tiene bastante claridad acerca de la fornicación. Fornicación es tener relaciones sexuales sin ser casados. 1era de Corintios capitulo 6 y verso 13 dice: "Las viandas para el vientre y el vientre para las viandas, pero tanto al uno como a las otras destruirá Dios, pero el cuerpo no es para la fornicación sino para el Señor y el Señor para el cuerpo". Ahí mismo en 1era de Corintios 6:18 dice: "Huíd de la fornicación, cualquier otro pecado que el hombre cometa está fuera del cuerpo, mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca". En ese momento en el que Jesús terminó su diálogo con ella vimos una gran cobija de fuego que la sumergió y no volvimos a verla, solamente escuchábamos el quemar de su carne y un gran gran gemido que no podré describir nunca.

Y seguíamos caminando con Jesús por aquél lugar, y el nos mostraba a los idólatras, a los hechizeros, a los fornicarios, a los adúlteros, los mentirosos, los homosexuales, junto con el tormento que tenían que padecer. Sentíamos mucho temor el continuar en aquél lugar, y lo único que queríamos hacer era salir pronto de él, mas sin embargo Jesús nos decía una y otra y otra vez, que era necesario que vieramos esto para que muchos creyeran, fué así como continuamos nuestro camino con el Señor, tomados mucho más fuerte de su mano a causa de nuestro temor. Y llegamos a otra sección; aquella sección realmente impactó mi vida, allí vimos a un joven, este joven tenía una edad de aproximadamente 23 años, este joven estaba suspendido hasta la cintura en medio de las llamas, no pudimos ver exactamente cuál era su castigo, pero observábamos en su frente el 666 taladrado y de igual forma una placa en su pecho que decía : "Estoy aquí por ser normal". Este jóven cuando vió a Jesús extendía sus manos hacia Él clamando misericordia también. La palabra de Dios dice también en Proverbios 14:12 "Hay camino que al hombre le parece derecho pero su fin es camino de muerte". Cuando nosotros leímos en aquella placa "Estoy aqui por ser normal". Le preguntamos a Jesús: "Jesús pero como asi?, acaso aquí en este lugar se viene por esta causa?". Y Jesús le dijo entonces: "Andrés por qué estas en este lugar?". Y Andrés le dijo: "Jesús, mientras vivía en la tierra, yo pensaba que solamente robar y matar eran pecados y por eso nunca me acerqué a tí. Salmos 9:17 dice: "Los malos serán trasladados al Seol, todas las gentes que se olvidan de Dios". Andrés se equivocó en gran manera, al clasificar el pecado como muchos lo hacen en la actualidad. Jesús dice en su palabra: "La paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna". Y cuando nos habla de pecado no lo clasifica. Andrés tuvo la oportunidad de conocer a Jesús por que el mismo lo reconocía, pero el desaprovechó esa oportunidad que Dios le había dado, tal vez tuvo miles y miles de oportunidades más, de volver su rostro a Él pero, nunca quiso, por eso se encontraba en ese lugar. También una gran cobija de fuego le sumergió y no volvimos a verle. Seguimos ahí caminando con Jesús y veíamos hacia lo lejos algo que caía como bultos, pero al acercarnos nos dimos cuenta que eran personas que estaban cayendo en ese momento, eran gentes que en la tierra morían en ese momento sin Cristo, y eran conducidas hacia el infierno. Vimos específicamente a un joven, este joven tan pronto cayó en aquél lugar, vinieron todos los demonios corriendo hacia él y con gran violencia comenzaron a destruir su cuerpo, inmediatamente se comenzó a llenar de gusanos, mientras esto sucedía este joven decia: "No! que esto!?? que pare ya!, yo no quiero estar en este lugar!, esto debe ser un sueño, sáquenme de aquí!!, yo no puedo estar en este lugar!". El nisiquiera se había dado cuenta que acababa de morir sin Cristo, y que se había ido a una eternidad sin Él. Y entonces los demonios se burlaban de él y continuaban atormentándo su cuerpo, y se comenzó a hacer inmediatamente el 666 en su frente y apareció de inmediato la placa en su pecho, y aunque no pudimos ver por qué motivo había ido allí a ese lugar, si sabemos que este joven nunca más pudo salir de allí. El Señor nos decía que el tormento de todas estas personas aumentaría mucho más en el día del Juicio, y si ahora sufren de una forma incalculable, no me puedo imaginar como será luego del juicio. En aquél lugar no vimos niños, solo miles y miles de jóvenes, habían hombres y mujeres, con razgos de muchas nacionalidades, sin embargo allí ya no existía diferencia de clase social, ni de ningun otro tipo.Lo único que todos querían era salir de ahí de ese lugar, querían que su tormento parara tan solo por un segundo como el rico de la historia, o que tal vez la punta de su lengua fuera mojada con agua para refrescar su sed intolerable, pero ya esto no podía ser posible, por que ellos eligieron la eternidad sin Dios, Dios nunca envía a nadie al infierno, cada uno es atraído conforme a sus obras. Gálatas 6:7 dice: "No os engañéis Dios no puede ser burlado, pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará". Hoy tu tienes la gran oportunidad de cambiar tu destino eterno. Hoy tienes a Jesús y dice la Biblia que mientras hay vida hay esperanza. Hoy tu tienes la vida , no la desaproveches, puede ser la última oportunidad.

Dios te bendiga.