lunes, 9 de junio de 2008

7 JOVENES EN EL INFIERNO 2da PARTE

dice:"Pero los cobárdes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechizeros, los idólatras y todos los mentirosos, tendrán su parte en el lago de fuego que arde con fuego y azufre que es la muerte segunda".

En el momento que Rogelio leyo este versículo Rogelio murió y llegó al infierno, este hombre hacía un mes que estaba en este lugar, aún tenía carne en su rostro, pero igualmente sufría como muchos de los que están ahí, este hombre de pronto no sabía el porqué estaba allí, pero yo creo que fué la única y la última oportunidad, que este hombre tuvo para aceptar al Señor, asi como muchos han tenido la oportunidad de aceptarlo. En este día te invito a que abras tu corazón a Jesús, que Él es el camino la verdad y la vida, y que por medio de Él solamente podemos ir al Reino de los Cielos, y que el Señor Jesús también nos pide que sigamos su camino en santidad y honor.

Que el Señor te bendiga.

(Cuarto testimonio)

Dios les bendiga hermanos, en el momento en el que el Señor me tomó de su mano, pude ver que estaba parada sobre una roca, mire atrás y vi que había un ángel tras nosotros, y comenzamos a descender en ese túnel oscuro a una velocidad indescriptible y en un trampo del camino yo voltié a mirar y vi que ese ángel ya no estaba, me llené de mucho más temor y miré al Señor y le dije: "Señor donde está en ángel?, por que no viene tras nosotros?" y Él me dijo: "Es que el no puede entrar a donde tú y yo vamos". Continuamos descendiendo y nos detuvimos en un lugar como cuando se detiene un acensor y se abrieron varios túneles y tomamos por aquél del que les hablaba mi hermana Sandra, en donde la gente estaba tomada de grilletes en sus manos, en donde estaban colgados de sus cráneos y vi que era una pared interminable, había millones y millones de personas que tenían gusanos que caminaban por todo su cuerpo, pero vi enfrente y vi que había una pared exactamente igual, yo dije: "Señor!, tantas personas en este lugar!" Y vino a mi mente una palabra que para entonces no conocía, y el Señor me dijo: "Es que el Seol, es insaciable, el infierno es insaciable". Y salimos del túnel y llegamos a aquél lugar al que llamamos "Valle da Pailas (calderos)". Estas pailas estaban rebosando de un lodo que hervía y comenzamos a acercarnos a una de ellas, y a la primera persona que pude ver de cerca fué a una mujer. El Señor fijó su mirada en ella, mientras que ella subía y bajaba en ese lodo que hervía, pero cuando Él fijó su mirada ella se quedo suspendida como hasta la cintura, y el Señor la miró y le dijo: "Mujer, como te llamas?". Y ella le dijo: "Me llamo Rubiela". Yo veía que esta mujer tenía su cabello lleno totalmente de aquél lodo que hervía, carne colgaba de sus huesos ya enegrecidos por el fuego, entraban gusanos por las cuencas de sus ojos, salían por su boca, entraban por su nariz, salían de sus oídos y por donde no podían entrar, sencillamente abrían un hueco, le causaban tal dolor!, esta mujer miraba desesperadamente al Señor y le decía:"Jesús, ten misericordia de mí! Sácame de este lugar!, ten misericordia de mí!, yo ya no puedo más!, que pare ya Señor, yo ya no puedo más!,ten misericordia de mí!". El Señor le pregunto a esta mujer por que estaba ahí. Ella le dijo: "Señor, estoy aquí por vanidad". Y eso mismo era lo que decía aquella placa que tenía incrustada en su pecho, ella decía que tenía en su mano un frasco, yo miraba un tarro común y corriente, ella veía un perfume lujoso, y ella tenía que tomarlo y aplicar ese ácido que hervía, en todo su cuerpo, y el momento en que lo hacía toda su carne se derretía y gritaba desesperadamente y decía: "Jesús! ya no puedo más!, ten misericordia de mí!, sácame de aquí aunque sea un segundo!, ten misericordia de mí!".

Yo no estoy diciendo que es pecado aplicarse un perfume. El Señor nos dijo que esta mujer estaba ahí por su perfume, la palabra de Dios nos dice en Deuteronomio 5:7 "No tendrás Dioses ajenos delante de mí, dice El Señor", esta mujer estaba allí por que puso en primer lugar su vanidad. Por que el primer lugar en su vida eran sus perfumes, su arreglo personal, pero Jesús es Rey de Reyes y Señor de Señores, Él debe ser el primero, el segundo , el tercero en tu vida, por eso, es que esta mujer estaba allí, por haber puesto en primer lugar su vanidad.

El Señor la miró con tristeza y le dijo:"Rubiela, es tarde para tí, gusanos serán tu cama y gusanos te cubrirán". En esos momentos de levantó una cobija de fuego que la cubrió totalmente, mientras que se consumía en aquella paila , gimiendo desesperadamente de dolor.

Nos fuimos alejando de aquél lugar y comenzamos a acercarnos a unas puertas gigantezcas, que a medida que nos acercábamos se fueron abriendo, en el momento que estuvimos adentro, pudimos ver que era una caverna gigantezca y vimos hacia lo alto, luces de colores que se movían, vimos como una cámara de humo y de repente como que empezamos a escuchar música: salsa, ballenato, rock y toda esta música que se escucha secularmente en las emisoras. De repente, el Señor que es todo poderoso, hizo un movimiento de su mano y vimos millones y millones de personas que estaban colgadas con grilletes en sus manos, que estaban brincando desenfrenadamente sobre el fuego, y el Señor nos mira y nos dice: "Miren, esta es la paga para los bailadores". Ellos tenían que brincar sin poder detenerse un segundo. Si sonaba salsa , tenían que brincar al son de la salsa, si sonaba rock tenían que brincar al son del rock. Pero lo peor de todo no era eso, no era que no podían detenerse, lo peor de todo era que sus zapatos no eran normales, tenían unos clavos de aproximadamente 15 centímetros de largo, que estaban atravesados hacia arriba, y tenían que brincar y brincar sin poder detenerse un segundo, aquellos que querían detenerse venían demonios con lanzas y se las enterraban y les maldecían y les decían: "Alábalo por que este es tu reino, alabalo, alábalo, no puedes detenerte, tienes que alabarlo, tienes que brincar, tienes que bailar, no puedes detenerte un segundo". Lo peor de todo en este lugar, sabes que es?, es que la mayoría de las personas que estaban ahí en este lugar, habían sido cristianos que habían muerto en una discoteca, muchas personas se preguntan y dicen: "Pero donde dice la Biblia que es malo bailar?". En Santiago 4:4 nos dice la palabra: "Oh! Almas adúlteras no sabéis que la amistad con el mundo es enemistad contra Dios?, cualquiera pues que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios". Y 1 era de Juan capitulo 2 versículos del 15 al 17 nos dice:"No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo, si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en Él, por que todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida no provienen del Padre sino del mundo, y el mundo pasa y sus deseos, pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre". Recuerda que el mundo pasa, esto se acaba, pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre, y amigo hermano, al salir de este lugar vimos unas como pasarelas, que eran las que dividían el infierno como en secciones de sufrimiento, luego vimos sobre ellas a un espíritu, en la misma forma de un muñeco que hemos visto sobre la tierra, aquí es llamado duende, troll o gnomo. Tiene el pelo de colores, tiene cara de viejo y cuerpo de niño, no tiene sexo y además sus ojos destellan maldad.Y el Señor nos mostraba que este espíritu es un espíritu de lascivia, y el tenía una lanza en sus manos y modelaba sobre aquella pasarela como cualquier reina, como cualquier modelo, y a su paso enterraba la lanza en aquellas personas que se hallaban abajo de el, y les maldecía y les decía: "Acuérdate el dia que pasaste por una iglesia cristiana y no quisiste entrar, acuerdate del día que te predicaron y no quisiste escuchar, acuerdate del día que te entregaron un tratado y tu lo tiraste". Y ellos trataban de taparse lo que les quedaba de oidos y le decían: "Cállate!, cállate! no me digas más!, no quiero saber más!, cállate!". Pero ellos se gozaban, ellos se deleitaban en su dolor.

Continuamos caminando con el Señor, y mientras la gente gritaba y gemía pidiendo misericordia, escuchamos aun hombre que clamaba aún más fuerte que todos los que se hallaban ahí, y este hombre comenzó a clamar diciendo: "Padre!, Padre ten misericordia de mí!". El Señor no iba a detenerse con este hombre, pero cuando le llamo Padre, Él se estremeció y lo volteó a mirar y le dijo: "Padre?, tú me llamas Padre?, no!, yo no soy tu Padre, ni tú eres mi hijo, por que si fueras mi hijo estarías conmigo en el Reino de los Cielos, vosotros sois hijos de vuestro padre el diablo". En ese momento se levantó una cobija de fuego y lo cubrió totalmente.

Y el Señor nos contaba la historia de este hombre, y nos decía que el le llamaba Padre por que él le había conocido, que era un hombre que había asistido a la iglesia, al cual le había hablado por su palabra, al que le había dado mil promesas.Y nosotros le dijimos: "Señor pero entonces que pasaba!?". El Señor nos dijo: "Es que el, vivía una vida doble, era uno en su casa y otro en la iglesia, el decía bueno, pues como aqui cerca no vive ni el pastor, ni ningún hermano, yo puedo hacer lo que quiera".

Pero se le olvido que los ojos de Dios estan puestos sobre nuestros caminos, y que nadie puede burlar al Señor.La palabra de Dios nos dice: "No os engañéis , Dios no puede ser burlado, pues todo lo que el hombre sembrare eso mismo segará".

Este hombre estaba sufriendo mil veces más que cualquier persona en el infierno, estaba pagando una doble condenación, la condenación por su pecado, y la condenación por haber creído que al Señor se le podá burlar.

El pueblo hoy en día se ha acostumbrado a jerarquizar el pecado, acostumbramos a decir, que es más pecador, el ladrón y el violador, el homosexual, que el mentiroso y que el chismoso, pero ante los ojos de Dios, estos pecados pesan lo mismo.Y la Biblia nos dice, la palabra de Dios nos dice que la paga del pecado es muerte, que el alma que pecare, esa morirá.

Amigo hermano, yo te invito hoy que Jesús está extendiendo su mano, está extendiendo su misericordia en tu vida, tu te arrepientas, la palabra de Dios nos dice que el que se arrepiente y que se aparta de su pecado alcanzará misericordia. Y es mejor creer ahora, que esperar para comprobar después.

Dios te bendiga.

(Quinto testimonio)

La palabra de Dios dice en el libro de Romanos 6:23 "Por que la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, Señor nuestro".

Cuando descendimos a aquél lugar comencé a experimentar el dolor y el sufrimiento de lo que es la muerte, y estaba muy asustado por lo que estaba viendo. Comencé a darme cuenta que había muchas personas ahí, y cada uno gritaba y gemía. Veíamos como hacia lo lejos se veían unas tinieblas. Pero el Señor con su presencia, comenzó a discipar estas tinieblas en aquél lugar, cuando seguimos caminando y escuchabamos los gritos y lamentos de miles y miles de personas que gritaban al unísono y pedían que el Señor los sacáse de aquél lugar, en ese momento comenzamos a darnos cuenta de que había muchas personas ahí, comenzamos a sentir un gran dolor por que veíamos que el Señor también sufría cada vez que veía a estas personas. Muchos les gritaban y le decían: "Señor!, permítenos salir aunque sea un segundo, un instánte de este lugar!, permíteme salir!". Muchas veces el Señor les decía y les preguntaba: "Pero para que quieres salir de este lugar?" y ellos decían: "Por que quiero ser salvo!, por que quiero arrepentirme y ser salvo!". Pero ya era tarde para ellos, y querido hermano que me escuchas, recuerda algo, la oportunidad es para ti y para mi, ahora es cuando nosotros debemos decidir para dónde queremos ir, a un lugar eterno de salvación o a un lugar eterno de condenación.

Comenzamos a caminar y me di cuenta como se hacía un piso debajo de nuestros pies y cuando ya pasabamos este piso se caía, y un fango que hervia y hervía y un fuego que salía de ese fango y un olor que despedía muy profundo que empezaba a trastornar nuestro cuerpo, nos causaba náuseas el sentir este olor, y el grito de muchas personas, de muchos lamentos de muchas personas,hacia a lo lejos comence a darme cuenta como un hombre se suspendia estaba a la altura de su cintura y cuando sacaba sus manos como se caía la piel de sus huesos y dentro de él, se veía un humo gris, y mis compañeros y yo le preguntamos qué es ese humo gris? que se ve dentro del cuerpo de ellos. Y el Señor nos decía: "Ese humo gris es su alma, que ha quedado atrapada en un cuerpo de pecado". Como lo dice Apocalipsis 14:11 "Que el humo de sus tormentos sube por los siglos de los siglos y no tienen reposo ni de día ni de noche".

En aquél lugar comenzamos a darnos cuenta de muchas cosas que habíamos ignorado durante mucho tiempo de aquí de la tierra. Que aquí es donde sabemos a dónde vamos a ir, a un lugar eterno de salvación o de condenación. Seguimos caminando tomados de la mano del Señor y nos dimos cuenta que el infierno está dividido en diferentes secciones de sufrimientos. Y fuimos a un lugar en donde había muchas mazmorras.Y veiamos a unas almas que estaban en ese lugar atormentadas por unas clases de demonios, y estos demonios atormentaban a estas personas y ahi se burlaban de ellas y le decían: "Maldito ahora si alaba a satanás, alábalo, ahora si, sírvele como le servías en la tierra". Y ellos sufrian por que aún el castigo, los gusanos, el fuego que los consumía, un ácido que les consumía toda su piel, allí los atormentaba.

Comenzamos a ver en una de estas mazmorras a dos jóvenes, dos jóvenes que estaban allí y tenían en sus manos unas dagas y comenzaban a puñalearse y el uno al otro se decían palabras, y se maltrataban y se injuriaban de una forma, y se decían : "Maldito! por tu culpa yo estoy en este lugar!, por que tu hiciste que yo llegase a este lugar de tormento!, por que tu cegaste mi vida! y no me permitiste conocer al Señor!, no me permitiste recibirlo, por que muchas veces cuando tuve la oportunidad, tu me decías que no, y por eso ahora yo estoy en este lugar de tormento!, atormentado de día y de noche". En ese momento comenzamos a ver una visión de la revelación que el Señor nos estaba dando y comenzamos a ver a estos dos jóvenes como un día estaban divirtiéndose en una taberna, y en un momento que tuvieron de embriaguez comenzaron a discutir y tenían una disputa, una contienda ahí entre ellos, uno saco una botella y el otro sacó una navaja, y comenzaron a pelear en ese momento y comenzaron a luchar, cuando en ese momento comenzaron a puñalearse el uno al otro hasta que acabaron con sus vidas, y esa misma escena que vivieron allí en la tierra la tenían que estar repitiendo allí en aquél lugar, y lo terrible que aún venía un recuerdo a ellos que aquí en la tierra ellos se conocían y se estimaban como dos amigos, como dos personas que se habían conocido desde muy niños y se habían estimado como hermanos. Pero déjame decirte amigo y hermano, que amigo solo hay uno y se llama Jesús de Nazaret, ese amigo verdadero, ese amigo fiel, que realmente esta en todos los momentos, caminamos con el Señor y comenzamos a darnos cuenta, allí en aquellas mazmorras a una mujer que estba allí revolcandose en un fango, su cabello todo desordenado, y veíamos como allí en aquél fango en esa mazmorra veiamos como una serpiente se enrollaba en su cuerpo y comenzaba a introducirse por sus partes bajas y tenían una relación. Allí las personas, los hombres y las mujeres que sienten en la fornicación, que viven la fornicación aquí en la tierra, también en el infierno lo van a vivir, pero allí van a hacerlo con serpientes, y esas serpientes tenían unos punzones como de unos 15 centímetros de largo y entraba por su cuerpo y comenzaba a destruir todo su cuerpo, comenzaba a destruir todo su cuerpo en ese momento, y comenzabamos a escuchar como ella gritaba y gemía de dolor, le decía al Señor: "Señor que pare ya! , no quiero mas este sufrimiento!, no quiero más este sufrimiento que pare ya! por favor!!". Y veíamos como esa serpiente se introducía y destruía todo su cuerpo, y gritaba y se lamentaba: "Ya no lo vuelvo a hacer!, ya no quiero mas! que pare! que pare por favor!, ya! no quiero mas!". En ese momento nosotros tapamos aún nuestros oídos, pero no podíamos dejar de oir lo que ella decía y gritaba, y tapabamos aún más nuestros oídos y no queríamos seguir escuchando ni viendo y le decíamos al Señor: "Señor ya no mas!". Pero el Señor nos decía: "Es necesario que veas para que cuentes a mi pueblo, por que mi pueblo, por que mi pueblo esta siendo destruido, por que mi pueblo esta ignorando la verdadera salvación, el verdadero camino hacia la salvación".

Seguimos caminando y hacia lo lejos comenzamos a ver un valle gigantezco, un mar inmenso, un lago gigantezco allí, pero de dolor, de sufrimiento, de una lava que hervía con hervor de fuego como dice la Palabra de Dios, y como allí miles y miles de personas que sacaban sus manos, y aún había muchos demonios que sobrevolaban este lago y los hundían con unas lanzas en forma de "S", y les decían y se burlaban de ellos y les decían: "Maldito, ahora si!, alaba a satanás, ahora si! alábalo!, ahora si sírvele! como le servías en la tierra". Y podíamos ver muchas personas allí y veíamos muchas escenas de personas allí, pero aún asi nosotros nos sentíamos atemorizados, nos tomabamos de las manos, por que nosotros sentíamos que si nos soltabamos de la mano del Señor nos podíamos quedar en aquél lugar, nosotros estabamos asustados y atermorizados por lo que estabamos sintiéndo en ese momento, y vimos hacia lo lejos a un hombre que estaba suspendido en la mitad de aquél lago, y a este hombre se le veía en su rostro un dolor, además del sufrimiento que sentía, había dos demonios que sobrevolaban su cuerpo allí, y estos dos demonios tomaban y punzaban su cuerpo y llegaban y le sumergían las lanzas y sacaban sus costillas, y estos dos demonios se burlaban de él y reían, y él sentia, y el Señor nos mostraba a ese hombre con ese sufrimiento que sentía, pero dentro de él había un sufrimiento como el del rico de la historia, allí el también estaba atormentado por el recuerdo de que su familia podía llegar también a aquél lugar de tormento, que su familia podía estar allí también, y que tuvo la oportunidad de haberles hablado pero que nunca se preocupó por darles un mensaje de salvación para que no llegaran a este lugar de tormento, allí el se recordaba que había habido una oportunidad para todos ellos, y que él había sido una persona importante para llevar este mensaje pero ignoró esto, y estaba preocupado por sus hijos y por su esposa, aquí en aquel lugar, eso lo atormentaba, y aún estos demonios venían y le amputaban sus brazos y el caía en este fango, caía en este fango que hervía con fuego de azufre, que hervía y el se revolcaba del dolor por que este fango le quemaba toda su carne, comenzaba a desprenderse su carne y se consumía en este fango y comenzaba a quedar un cuerpo calavérico, y el comenzaba a salir , y comenzaba a retorcerse como una serpiente para poder salir de allí, y venían los demonios y lo hundían y lo metían más hacia este fango allí en aquél lugar.

Después de esto comenzamos a ver hacia lo lejos una serie de demonios que estaban alli, y vi algo que me cautivaba y me di cuenta que uno de estos demonios estaba sin un ala y le preguntamos al Señor: "Señor, por que a este demonio le falta un ala?". El Señor nos decía: "este demonio fué lanzado para un propósito aquí en la tierra, pero este demonio no cumplió su cometido y así fué lanzado nuevamente al infierno por un siervo de Dios y satanás vino y lo castigó y fué quitada y amputada esa ala". En ese momento entendimos y comprendimos que nosotros tenemos poder y autoridad para hechar fuera demonios para hechar fuera toda potestad, todo principado. Querido amigo que me escuchas, este testimonio no es para condenación sino para salvación, para que te des cuenta en que condición tu estas delante de Dios para salvación y no para condenación, querido amigo por favor en este momento, coloca tu corazón delante de Dios y presenta tus pecados, para que si llegáse a venir en este momento el Señor, tu te fueras con Él, y no te fueras a este lugar de tormento, por que allí es el lloro y el crujir de dientes, allí es cuando vamos a entender verdaderamente por qué Dios pagó un precio en la Cruz del Calvario. Allí habían muchas personas condenadas y aún ignorando que ellos habían sido condenados por una serie de pecados que ellos creían que no era pecado. Querido amigo, examínate!, exaínate!, no crea que la mentira, el robo, la vanidad, todo esto es pecado delante de Dios, arrepiéntete hermano!, querido amigo que me escuchas, yo te doy este mensaje para que te arrepientas y busques aún más al Señor.

(Sexto testimonio)

Salmos 62:12 dice: "Y tuya oh Señor es la misericordia por que tu pagas a cada uno conforme a su obra".

En aquella mañana cuando el Señor nos visitó en el cuarto donde nos encontrábamos y me tomó de la mano y comenzamos a descender con mis hermanos, mi vida estaba completamente llena de temor, sentía algo que no puedo describir, solamente sabía que no podía soltarme de la mano de mi Salvador, que Él era mi vida y mi luz, que mi esperanza estaba únicamente en Él, por que si no era así yo podía quedarme en aquél lugar. Jamás pensé ir a aquél lugar, a conocer el infierno, además por que no creía que existiera, siempre pensé, aún siendo cristiana equivocadamente que podía ir a un purgatorio, sin embargo Dios mostró a mi vida esta realidad, en aquél momento cuando llegamos al infierno, sólo sé que este lugar tembló y que todos los demonios salieron a esconderse por que no había ninguno que pudiera resisitr la presencia de Jesús.

Escuchamos por un momento que todas las almas aumentaron su clamor por que todas conocían que en ese día estaba Jesús de Nazaret, todos sabían que el era el único que podría tal vez sacarlos de ese lugar, tenían esa esperanza, aunque realmente no fuera cierta.

Y fué así como comenzamos a caminar de la mano de Jesús, y llegamos a la sección de los fornicarios. Allí Jesús fijó su mirada sobre una mujer, esta mujer estaba totalmente sumergida en el fuego, pero cuando Jesús le miró comenzó a salir del fuego, aunque su sufrimiento no paraba; nosotros comenzamos a ver a aquella mujer completamente desnuda, podíamos ver cada una de sus características físicas, su cuerpo estaba completamente sucio y maloliente, su cabello estaba alborotado, despeinado, y tenía como una lava amarillenta verdosa encima, ya no tenía ojos, sin embargo a través de las cuencas de sus ojos podía vernos, y ya sus labios se caían a pedazos mientras estaba allí, gimiendo y gritando del dolor, ya no tenía orejas, sino solamente su orificio, podíamos ver como con sus manos enegrecidas y huesudas trataba de componer la carne que caía de su rostro tomandola del fuego y poniendola una vez más en su cara, pero esto le producía mayor dolor aún, entonces ella se estremecía aun más y gritaba aún más, sus lamentos parecía que comenzaban pero que no tenían fin, podíamos ver su cuerpo lleno de gusanos también y una serpiente enrollada en su brazo, muy grande, demasiado ancha que tenía punzones alrededor, esta mujer tenía taladrado el 666 el número de la bestia del cual nos habla la palabra en Apocalipsis, tenía una placa en un material muy extraño, no lo conocíamos, no lo podíamos distinguir, sin embargo veíamos que este material no se consumía con el fuego y que esta placa no se movía por ningun motivo sino que permanecía fija en su pecho, esta placa estaba escrita en un idioma extraño, pero nosotros podíamos entender en ese momento lo que decía en ella, en esa placa, decia: "Estoy aquí por fornicaria". Cuando Jesús la vió le dijo: "Helena tú por qué estás aquí en este lugar?". Elena mientras hablaba con Jesús se retorcía, se retorcía y gritaba a causa del dolor que le producía su castigo. Y le dijo Helena: "Señor estoy aqui por fornicaria". Y comenzó a pedirle perdón a Jesús una y otra vez. Sin embargo en un momento comenzamos a ver la historia de su muerte; Helena se encontraba teniendo una relación sexual con uno de sus amantes, por que creyó que el compañero con el que ella vivía había salido de viaje, pero el volvió a su casa, la encontró con su amante, entonces se fué hacia la cocina y tomó un gran puñal enterrándoselo en la espalda de esta forma Helena murió y fué conducida hacia el infierno de la misma forma como habia muerto desnuda, así mismo se veía en el infierno.

En el infierno todas las cosas se materializan, y podíamos ver aún presente ese puñal clavado en su espalda, que le producía un gran dolor ahí a Helena, para ese entonces ella llevaba 7 años en este lugar, recordaba uno a uno de los instantes de su vida, recordaba cada momento de su muerte, recordaba también que un día tal vez le habían predicado a ese Jesús que ahora tenía en frente suyo, y que era el único que podía salvarla, pero ya era tarde para ella asi como para todos los que estaban ahí en el infierno. La palabra de Dios, tiene bastante claridad acerca de la fornicación. Fornicación es tener relaciones sexuales sin ser casados. 1era de Corintios capitulo 6 y verso 13 dice: "Las viandas para el vientre y el vientre para las viandas, pero tanto al uno como a las otras destruirá Dios, pero el cuerpo no es para la fornicación sino para el Señor y el Señor para el cuerpo". Ahí mismo en 1era de Corintios 6:18 dice: "Huíd de la fornicación, cualquier otro pecado que el hombre cometa está fuera del cuerpo, mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca". En ese momento en el que Jesús terminó su diálogo con ella vimos una gran cobija de fuego que la sumergió y no volvimos a verla, solamente escuchábamos el quemar de su carne y un gran gran gemido que no podré describir nunca.

Y seguíamos caminando con Jesús por aquél lugar, y el nos mostraba a los idólatras, a los hechizeros, a los fornicarios, a los adúlteros, los mentirosos, los homosexuales, junto con el tormento que tenían que padecer. Sentíamos mucho temor el continuar en aquél lugar, y lo único que queríamos hacer era salir pronto de él, mas sin embargo Jesús nos decía una y otra y otra vez, que era necesario que vieramos esto para que muchos creyeran, fué así como continuamos nuestro camino con el Señor, tomados mucho más fuerte de su mano a causa de nuestro temor. Y llegamos a otra sección; aquella sección realmente impactó mi vida, allí vimos a un joven, este joven tenía una edad de aproximadamente 23 años, este joven estaba suspendido hasta la cintura en medio de las llamas, no pudimos ver exactamente cuál era su castigo, pero observábamos en su frente el 666 taladrado y de igual forma una placa en su pecho que decía : "Estoy aquí por ser normal". Este jóven cuando vió a Jesús extendía sus manos hacia Él clamando misericordia también. La palabra de Dios dice también en Proverbios 14:12 "Hay camino que al hombre le parece derecho pero su fin es camino de muerte". Cuando nosotros leímos en aquella placa "Estoy aqui por ser normal". Le preguntamos a Jesús: "Jesús pero como asi?, acaso aquí en este lugar se viene por esta causa?". Y Jesús le dijo entonces: "Andrés por qué estas en este lugar?". Y Andrés le dijo: "Jesús, mientras vivía en la tierra, yo pensaba que solamente robar y matar eran pecados y por eso nunca me acerqué a tí. Salmos 9:17 dice: "Los malos serán trasladados al Seol, todas las gentes que se olvidan de Dios". Andrés se equivocó en gran manera, al clasificar el pecado como muchos lo hacen en la actualidad. Jesús dice en su palabra: "La paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna". Y cuando nos habla de pecado no lo clasifica. Andrés tuvo la oportunidad de conocer a Jesús por que el mismo lo reconocía, pero el desaprovechó esa oportunidad que Dios le había dado, tal vez tuvo miles y miles de oportunidades más, de volver su rostro a Él pero, nunca quiso, por eso se encontraba en ese lugar. También una gran cobija de fuego le sumergió y no volvimos a verle. Seguimos ahí caminando con Jesús y veíamos hacia lo lejos algo que caía como bultos, pero al acercarnos nos dimos cuenta que eran personas que estaban cayendo en ese momento, eran gentes que en la tierra morían en ese momento sin Cristo, y eran conducidas hacia el infierno. Vimos específicamente a un joven, este joven tan pronto cayó en aquél lugar, vinieron todos los demonios corriendo hacia él y con gran violencia comenzaron a destruir su cuerpo, inmediatamente se comenzó a llenar de gusanos, mientras esto sucedía este joven decia: "No! que esto!?? que pare ya!, yo no quiero estar en este lugar!, esto debe ser un sueño, sáquenme de aquí!!, yo no puedo estar en este lugar!". El nisiquiera se había dado cuenta que acababa de morir sin Cristo, y que se había ido a una eternidad sin Él. Y entonces los demonios se burlaban de él y continuaban atormentándo su cuerpo, y se comenzó a hacer inmediatamente el 666 en su frente y apareció de inmediato la placa en su pecho, y aunque no pudimos ver por qué motivo había ido allí a ese lugar, si sabemos que este joven nunca más pudo salir de allí. El Señor nos decía que el tormento de todas estas personas aumentaría mucho más en el día del Juicio, y si ahora sufren de una forma incalculable, no me puedo imaginar como será luego del juicio. En aquél lugar no vimos niños, solo miles y miles de jóvenes, habían hombres y mujeres, con razgos de muchas nacionalidades, sin embargo allí ya no existía diferencia de clase social, ni de ningun otro tipo.Lo único que todos querían era salir de ahí de ese lugar, querían que su tormento parara tan solo por un segundo como el rico de la historia, o que tal vez la punta de su lengua fuera mojada con agua para refrescar su sed intolerable, pero ya esto no podía ser posible, por que ellos eligieron la eternidad sin Dios, Dios nunca envía a nadie al infierno, cada uno es atraído conforme a sus obras. Gálatas 6:7 dice: "No os engañéis Dios no puede ser burlado, pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará". Hoy tu tienes la gran oportunidad de cambiar tu destino eterno. Hoy tienes a Jesús y dice la Biblia que mientras hay vida hay esperanza. Hoy tu tienes la vida , no la desaproveches, puede ser la última oportunidad.

Dios te bendiga.

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